El Atlético jugará contra el Eindhoven la final del Teresa Herrera
ENVIADO ESPECIALEl Atlético de Madrid jugará esta noche la final del trofeo Teresa Herrera, en La Coruña, contra el Eindhoven, después de que el equipo holandés derrotara ayer a la Real Sociedad por 2-1. Por otra parte, los jugadores madrileños se vieron obligados a desalojar el hotel donde están alojados a las 2.30 horas del sábado por una amenaza de bomba.
Sobre el resultado que consiguió el Atlético frente al Liverpool (5-1), el presidente, Jesús Gil, manifestó: "Ésto es otra cosa. Me ha costado un año de sufrimiento conseguir el equipo de lucha y coraje que yo quiero". Y Maguregui, el entrenador, advierte: "El Atlético aún está al 50% de lo que puede rendir en el comienzo de la Liga".
Entre los aspectos susceptibles de mejora a los que se refiere Maguregui se encuentra el funcionamiento y sincronización de la línea defensiva como tal. Arteche y Juan Carlos aún no han alcanzado su mejor nivel físico -el primero apenas lleva una semana de entrenamiento-, y el fichaje canario, Marrero, está lesionado, aunque Tomás mantiene un buen tono defensivo y Sergio está demostrando sus posibilidades como titular. Más seguridad inspira la línea ofensiva. La goleada al Liverpool ha contribuido a ratificar la tesis de Maguregui: "Con Baltazar, Futre, Manolo y Carlos, este equipo va a marcar muchos goles".
La capitanía
Arteche, capitán del equipo durante las últimas temporadas y degradado del cargo por Gil a raíz del polémico enfrentamiento económico que ambos sostuvieron recientemente, se niega ahora a aceptar ser el suplente de Futre en la capitanía. El portugués fue designado directamente por Gil como nuevo capitán con el consentimiento de los jugadores, y la vuelta de Arteche al equipo ha creado un problema de rango cuando Futre es sustituido. Nadie quiere coger el brazalete de capitán.Cada vez que Maguregui sustituye al portugués se asiste a un curioso espectáculo entre los jugadores: en lugar de pasarse el balón se pasan el brazalete. En el primer partido de la pretemporada, en Elche, Futre se lo quiso dar a Tomás siguiendo las órdenes del entrenador, pero éste se lo pasó a Parra para que, a su vez, se lo diese a Arteche por razones de veteranía, que se negó a cogerlo pero al final se lo colocó de mala gana en el brazo.
El pasado viernes, contra el Liverpool, se repitió la escena pero con un final distinto e insólito. Futre quiso darle el brazalete a Tomás, el defensa comenzó a silbar sin darse por aludido, y Carlos persiguió a Arteche para que éste se lo colocara. Arteche volvió a negarse y esta vez acabó sin ponérselo en el brazo. El brazalete acabó finalmente guardado en el forro de sus pantalones.
Y mientras, Jesús Gil, ha suspendido el viaje previsto a Atenas donde el equipo iba a jugar un torneo con el Olimpiacos, Ajax y Peñarol. Gil no ha recibido garantías respecto a los 30 millones que su club iba a cobrar.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.