Irlanda y la URSS, en busca del triunfo que les clasifique para las semifinales

En el momento que irlandeses y soviéticos salten al terreno del Niedersachsenstadion de Hannover esta tarde (TV 2, 20.15 horas) sabrán por quién han tocado las campanas en el duelo anterior entre Inglaterra y Holanda, y serán conscientes que dos puntos les pueden garantizar una plaza en las semifinales. Ni Charlton ni sus hombres son especialmente optimistas y se niegan rotundamente a colgarse la etiqueta del equipo revelación del torneo a pesar de la victoria sobre Inglaterra.

Dicho triunfo fue catalogado como heroico por la Prensa irlandesa que incluso dedicó espacios en sus columnas a lamentarse de que ni Margaret Thatcher ni la Reina Isabel habían visto en televisión la humillación de su país. "Hay que ser realistas", confiesa Charlton, seleccionador irlandés. "Si ganamos fue porque Dios quiso. Tras el gol nuestro, pasé los peores 84 minutos de mi vida".Houghton, autor del gol histórico; se empeña en hacer el papel de antihéroe. "¿Qué quieres que diga? Fue mi primer gol en 16 partidos internacionales y es la segunda vez en mi vida que marco con la cabeza".

Además, los irlandeses siguen tan poco confiados en clasificarse para las semifinales que adoptan una actitud pasota ante los acontecimientos de su grupo, programando entrenamientos en horarios que coinciden con partidos. Así se perdieron el España-Dinamarca y ayer tampoco vieron el Dinamarca-RFA.

Lo que Charlton no se pierde para nada es el hombre del tiempo. En los últimos días ha hecho calor en Alemania "y eso puede ser nuestro peor enemigo, porque nuestro juego está basado en el derroche de energías. Ójala bajen las temperaturas". "Otra cosa importante. Por lo que he visto la nuestra es la única selección entre las ocho participantes que sale con sencillez al campo para hacer nuestro juego y sin importarnos un pepino lo que quieren hacer los rivales".

Buena defensa

Lobanovski, el seleccionador soviético, quedó tranquilizado por la prestación de sus defensas frente a los holandeses, sobre todo durante el segundo tiempo, cuando optaron por buscar asiduamente las cabezas de Bosman y Van Basten. Fue un buen augurio de cara a la capacidad para aguantar el asalto aéreo de los irlandeses. Además los soviéticos saben que si reproducen los rápidos contragolpes que tanto daño hicieron a Holanda, pueden destrozar a una defensa irlandesa que carece de cintura y no tiene una técnica muy depurada.

"Lo peor para los irlandeses", susurra un periodista de Dublín, "sería que empezasen a creer que son artistas del balón".

Alineaciones probables: Irlanda: Bonner; Morris, Moran, McCarthy, Hughton; McGrath, Houghton, Whelan, Galvin; Aldridge, Stapleton. Unión Soviética: Dasaev; Besonov, Jidiatulin, Kuznetzov, Demianenko, Zavarov, Rats, Aleinikov, Gutsinanov; Protasov y Mijailichenko.