Tamafumi Nito,
un joven japonés de 29 años, se llevó el pasado jueves una agradabilísima sorpresa: al abrir el buzón de su casa encontró nada más y nada menos que 12 millones de yenes (10 millones de pesetas), perfectamente empaquetados en fajos y envueltos en un periódico. "Me quedé helado", ha afirmado el joven; "al principio pensé que eran panfletos religiosos de los que reparte mi madre". Tamafumi Nito entregó el dinero a la policía de su barrio, que ha indicado que de momento nadie ha reclamado los 12 millones de yenes. Según un reglamento japonés, si dentro de seis meses nadie reclama el dinero, éste pasará a ser propiedad del joven.
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