El déficit comercial de 1987 rondó los dos billones de pesetas

El déficit comercial español aumentó el año pasado un 68%, hasta situarse en 1,83 billones de pesetas, según los datos oficiales publicados anoche por Aduanas. A la espera de conocer los ingresos y pagos por turismo y otros servicios, estas cifras reafirman la idea de que, por el deterioro de la balanza, y en especial la registrada con el resto de los países de la Comunidad Europea (CE), el sector exterior ha restado algo más de 2,5 puntos de erecimiento real al producto interior bruto (PIB). Si no fuera, por ello la actividad habría aumentado al mismo ritmo que la demanda interna (consumo e inversión) y por encima del 7%, a juicio de expertos privados y de la Administración.En pesetas, el año se ha cerrado con incrementos del 23,3% en las compras de mercancías y del 10,4% en las ventas. Por la caída del dólar, ambos aumentos resultan unos 15 puntos superiores si se expresan en la divisa norteamericana. El déficit en dólares ha subido un 90% respecto al año anterior.

Incremento comunitario

Pero el nuevo paso dado durante, 1987 por la concentración del comercio exterior español con la CE resta importancia a los datos en dólares. Ya el 63,8% de todas las ventas españolas han ido a los once, contra el 60,3% del año anterior, y el 54,6% de las compras, frente al 50,2% en 1986. El déficit con la CE ha sido de 615.324 millones de pesetas, casi el doble que el año pasado, pero en 1985 (antes de la adhesión) había superávit por más de 200.000 millones. Con turismo y servicios, la concentración de la balanza de pagos excederá el 70%.El balance de la Dirección General de Aduanas muestra que en diciembre se ha estrechado la diferencia entre el fuerte avance de las importaciones, provocado a lo largo de 1987 por el alto dinamismo de la inversión y del consumo, y el de las exportaciones, que en diciembre han consolidado su recuperación, sobre todo las dirigidas a la CE (15,1 de aumento). Por el aumento del déficit, en Economía se temía durante las últimas semanas que el sector exterior llegara a restar tres puntos al PIB, frente a los 1,7 que se preveían en junio.

Si se excluyen productos energéticos (factura que sólo ha crecido en pesetas un 5,9% durante 1987, cuando se ha interrumpido el descenso iniciado en 1985), las compras han aumentado el 27,4%. Los sectores que más han elevado sus importaciones han sido automóviles (74,9%), instrumentos de medición y relojería (53,2%), calzado (47%), maquinaria eléctrica (42%), mecánica (40% y textiles y pieles (32%).

Las exportaciones más dinámicas han procedido de los sectores de bebidas y tabaco (29% de aumento), manufacturas de caucho (24%), productos agrícolas y ganaderos (23%), máquinaria mecánica (13%), automóviles (13%) y productos químicos (16%).