Cambio de rumbo a bajo coste
Los tanteos compradores están consiguiendo frenar la salida de papel en los mercados de valores, hasta el punto de que en esta última sesión el ambiente estaba cambiando sustancialmente. Las recuperaciones que registraron muchos valores industriales sirvieron, en parte, para que algunos restos vendedores se vieran favorecidos, al tiempo que los vendedores menos decididos han encontrado una excelente disculpa para esperar un poco más. Los altibajos han sido otra vez la constante de la jornada, aunque esta vez han sido más numerosos los avances. El resultado ha sido un cierre en el que medio mercado ofrecía unas expectativas discretas y el otro medio se limitaba a esperar el contagio.Más que una redefinición de la situación económica, lo que parece preocupar al mercado es la capacidad de arrastre de los valores punteros, pues algunas de las recuperaciones que se dieron ayer parecen tener como único objetivo la vuelta a la normalidad, entendiendo ésta como la propia capacidad del mercado de valerse por sí mismo.
En este sentido, puede afirmarse que las posibilidades de éxito son amplias, pues la mínima presencia de dinero cambia radicalmente el tono de los corros y la evolución de las cotizaciones. El único problema es que el dinero es escaso y, por tanto, el volumen contratado no apoya un cambio de tendencia, al menos no con la rapidez que exigen los inversores. Por ahora, la mayor parte de los sectores están respondiendo, dándose avances importantes en varios grupos industriales y resultando muy cortas las bajas. Las posiciones al cierre, estáticas, indican que las tensiones aún no han terminado y que hoy habrá que repetir la suerte, es decir, habrá que tapar muchas grietas con muy poco dinero, algo que no es imposible cuando todo el mundo colabora, aunque la proximidad del fin de semana siempre es un peligro.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.