La venta de bebidas alcohólicas y los desplazamientos de grupos violentos, prohibidos

El próximo 1 de septiembre entrará en vigor para España el convenio europeo sobre violencia e irrupciones de espectadores con motivo de manifestaciones deportivas, especialmente el fútbol. El convenio abarca todo tipo de medidas -la prohibición de venta de bebidas alcohólicas, incluida la cerveza, y de desplazamiento de grupos violentos, entre otras- para evitar las consecuencias negativas que suelen derivarse de ello. Los países que se han adherido al convenio son Suecia, Reino Unido, Portugal, Noruega, Italia, Islandia, Francia, Finlandia, Dinamarca, Chipre y España.

Según se afirma en el texto del convenio, publicado ayer en el BOE, la violencia es un fenómeno cuyos orígenes son extraños al deporte, aunque son las manifestaciones deportivas el terreno elegido en muchas ocasiones para estallidos de violencla. El ejemplo más dramático de este tipo de incidentes tuvo lugar hace dos años en el estadio Heysel, de Bruselas, donde, con motivo de la celebración de la final de la Copa de Europa de fútbol entre la Juventus y El Liverpool, fallecieron 39 personas y 450 resultaron heridas. En España han existido también serios enfrentamientos entre hinchadas; el más reciente, en La Coruña, el pasado 6 de junio, con las aficiones del Deportivo y el Celta como protagonistas, donde hubo 17 heridos. Este año también, el 18 de febrero, en Madrid, cuando la selección inglesa jugó contra la española, dos seguidores británicos resultaron heridos por arma blanca.Todos los Estados adheridos al convenio se comprometen al firmarlo a adoptar, dentro de los límites de sus disposiciones constitucionales, las medidas necesarias a fin de prevenir y sofocar la violencia, especialmente en el fútbol, aunque no quedan excluidos otros deportes en que puedan temerse violencia o invasiones. El convenio entró en vigor de forma general en noviembre de 1985, al ser firmado por Dinamarca, Suecia y el Reino Unido. Posteriormente, han ido adhiriéndose nuevos países.

Medidas

Entre las medidas para prevenir y sofocar la violencia y las invasiones de espectadores que incluye el convenio, y que todos los países adheridos se comprometen a asegurar, destacan las siguientes:- Movilizar servicios de orden suficientes para afrontar las movilizaciones de violencia e invasiones de campo, tanto en los estadios como en sus inmediaciones.

- Facilitar el intercambio de informaciones entre las fuerzas de policía de las distintas localidades o países.

- Aplicar penas o medidas administrativas adecuadas a las personas culpables de los disturbios.

- Estimular la coordinación entre los clubes y organización de desplazamientos.

- Impedir el desplazamiento a otras ciudades o países de potenciales perturbadores que pretendan asistir a los partidos.

- Velar por que la estructura de los estadios garantice la seguridad de los espectadores.

- Separar a los grupos de partidarios rivales en distintas tribunas y en diferentes puntos de venta de billetes.

- Impedir la entrada a los estadios a los promotores de disturbios conocidos y a las personas que se hallen bajo los efectos del alcohol o de las drogas.

- Prohibir a los espectadores introducir bebidas alcohólicas. Impedir la venta de este tipo de bebidas en los estadios y asegurarse de que todas las bebidas no alcohólicas que se sirvan estén en envases no peligrosos (ni de cristal ni de metal).

- Impedir la introducción en el estadio de otros objetos peligrosos, petardos, etcétera.

Además de detallar diferentes medidas de cooperación internacional de carácter preventivo, el convenio prevé las actuaciones de los países firmantes en caso de que resultaran detenidos los seguidores visitantes de otros países. Así, se deberá solicitar la extradición de personas, sospechosas de actos de violencia con ocasión de manifestaciones deportivas y, en caso de ser juzgadas fuera de su país, se tratará de trasladar a estas personas al país correspondiente para que cumplan su condena.

Los Estados se comprometen también a cooperar estrechamente con sus organizaciones deportivas nacionales y clubes, así como con los propietarios de los estadios.

Para la efectividad de este convenio existe un comité permanente, que se reúne como mínimo una, vez al año, normalmente convocado por el secretario general del Consejo de Europa.