Las electricas retrasan el pago de 20.000 millones a ENDESA
Las compañías eléctricas están retrasando el pago a la Empresa Nacional de Electricidad (ENDESA) de la energía que les suministra, como consecuencia de ciertas diferencias en la interpretación del contrato y a raíz de un recurso presentado al respecto. El retraso, según fuentes del sector público, apenas supera los 15 días, si bien la cantidad adeudada se eleva ya a 20.000 millones, de los que 5.000 millones corresponden a FECSA y unos 7.000 millones a Electra de Viesgo.ENDESA se encuentra reclamarido el pago de estos atrasos, si bilen "no parece apropiado en estos momentos", según fuentes de la empresa, recurrir a ninguna vía ejecutiva hasta que el problema se resuelva en conversaciones bilaterales. El problema con Electra de Viesgo es de naturaleza jurídica y responde a la interpretación que esta empresa da al contrato de suministro, que considera que el precio fijado se elevó como resultado del pacto de los intercambios de activos, en la que ella no participó.
Junta de accionistas
Por su situación particular, FECSA ha aplazado los pagos a ENDESA y esta sociedad interpreta que "por el momento no procede la ejecución del pago, como una manera de contribución a la solución de la crisis". La disputa con el sector es diferente, si bien el retraso es de sólo 15 días en un plazo bimensual.Por otro lado, ENDESA celebró ayer su junta de accionistas, en la que Feliciano Fuster, su presidente, presentó unos beneficios consolidados del grupo de 41.922 millones de pesetas en el ejercicio de 1986, de los que 36.738 millones corresponden a la sociedad eléctrica. Fuster resaltó el esfuerzo realizado por la compañía a la hora de mejorar la gestión y la eficacia, tras la compra de activos al sector privado.
Fuster fue crítico del informe sobre el sector eléctrico realizado por Rafael Termes, presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), que opinaba que la situación de la empresa pública "no era tan sólida". Fuster negó esta interpretación y rechazó el comentario del banquero -que calificó de "infundado"- en el sentido de que existía "un trasvase de beneficios de 40.000 millones anuales del sector privado al público". Al mismo tiempo, afirmó que los intercambios de activos, realizados el pasado año, fueron insuficientes para asegurar la estabilidad de todas las empresas. Ello, añadió, no quiere decir que no fuera positivo, puesto que las vendedoras mejoraron su situación.
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