Francisco Abraldes,
un joven de 21 años, nacido en Aguiño (La Coruña), se acostó como albañil en paro y se levantó señor marqués. La pasada semana recibió una notificación del Ministerio de Justicia en la que se le comunicaba la rehabilitación, a su favor y como legítimo propietario, de los títulos de marqués de Abraldes y señor de Guimaráns. El nuevo aristócrata cuenta que había oido mencionar a su padre "que teníamos antepasados enterrados en la catedral de Santiago" pero empezó las indagaciones cuando, al vender el pesquero familiar, escuchó en la notaría que su apellido "sonaba a marqués". Puesto en contacto con familiares en Argentina y con nobles que le ayudaron anónimamente, estableció que el título concedido por el rey Joao II de Portugal, formaba parte de un mayorazgo que fue desigualmente repartido entre las distintas ramas familiares y cuya reivindicación fue truncada por la guerra civil. En este reparto fueron adjudicadas distintas propiedades al marqués de Santa Cruz, cuyo actual titular es el ex general Alfonso Armada Comín. Francisco asegura que no tiene "ambiciones sociales", pero obviamente prefiere cambiar las visitas sociales a los andamiajes diversos por otras de mayor copete, por lo que también tratará de recuperar el marquesado de Santa Cruz.
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