Liberado el dirigente musulmán cuya detención provocó incidentes en Melilla

Abderramán Mohamed, el dirigente musulmán melillense detenido en la tarde del pasado jueves por amenazas a un comerciante para que cerrara su establecimiento a partir del lunes, fue puesto en libertad sin cargos a media mañana de ayer por orden del juez de instrucción José María Treviño. La detención de Mohamed provocó enfrentamientos entre la policía y unos 500 musulmanes que apedrearon la comisaría de Melilla. En los incidentes resultaron heridos leves ocho policías y un joven musulmán.

La detención de Mohamed se produjo a raíz de la denuncia formulada a la policía por un vendedor del mercado del Real, quien acusó al dirigente musulmán de formar parte de un piquete que le coaccionaba para cerrar su establecimiento a partir del próximo lunes. El colectivo musulmán ha convocado para los próximos días 22 y 23 un cierre de comercios musulmanes en protesta "contra la política colonialista del Gobierno". El cierre fue convocado, en principio, con carácter indefinido, pero representantes del colectivo reunidos anoche en asamblea decidieron restringirlo a sólo esas dos jornadas. Según el juez Treviño, la detención del dirigente musulmán, en caso de confirmarse la acusación, podría dar origen a una pena de prisión menor, por lo que no era preciso su ingreso en la cárcel ni mantener su detención. Mohamed fue conducido a comisaría, donde se le tomó declaración y fue comunicada la circunstancia al juez Treviño, quien posteriormente recibió la visita de representantes musulmanes, quienes le pidieron la libertad de Abderramán. El juez señaló que él no había ordenado la detención y que, mientras la policía no pusiera a Mohamed a disposición judicial, no podría tomar ninguna medida. El dirigente musulmán durmió en los calabozos de comisaría y se le permitió que le fueran entregadas mantas y otros enseres por miembros del colectivo musulmán melillense.Entretanto, corrió el rumor por los barrios musulmanes de que quien había sido detenido era el líder de la comunidad musulmana melillense, Aomar Mohamedi Dudú, lo que hizo que, poco a poco, fueran congregándose personas ante la comisaría y llegaron a sumar más de medio millar. Cuando iban a dispersarse pacíficamente, fueron arrojadas algunas piedras contra los cristales de la comisaría, por lo que la policía cargó contra los concentrados utilizando material antidisturbios. Una de las pelotas de goma disparadas por los policías golpeó en la nariz a un joven musulmán, quien fue ingresado en el hospital de la Cruz Roja con posible fractura del tabique nasal. Los incidentes dieron el resultado de ocho policías nacionales heridos leves por el lanzamiento de piedras, de los cuales dos tuvieron que ser dados ayer de baja. A la entrada del barrio musulmán de la Cañada de la Muerte, grupos musulmanes incontrolados formaron una barricada e impidieron el acceso de la policía, que efectuó una nueva carga. Hoy está prevista la visita a Melilla del ministro de Cultura y portavoz del Gobierno, Javier Solana, quien llegará acompañado por el subsecretario de Interior, José Luis Martín Palacín, y por el director general de Política Interior, Rafael de Francisco. Por otro lado, la Asociación Musulmana de Ceuta, que encabeza Mohamed Ali, ha desconvocado la manifestación contra la ley de extranjería prevista para hoy, informa Efe.