El sistema defensivo español es compatible con el de la OTAN, según el embajador Ojeda

La primera sesión negociadora entre España y la Alianza Atlántica después de la celebración del referéndum de marzo finalizó ayer en la capital belga con una "doble comprobación": "que nuestro sistema defensivo es compatible con el Atlántico y que podemos participar en la OTAN sin integrarnos en su estructura militar", según señaló Jaime de Ojeda, jefe de la delegación española.Las dos jornadas de conversaciones estuvieron dedicadas a describirse oficial y mutuamente las respectivas organizaciones de la defensa, una información que tanto Madrid como la OTAN conocían prácticamente de antemano, pero sobre la que ambas partes pudieron hacerse preguntas por la tarde después de haber escuchado las ponencias de la mañana.

Ojeda, que es también embajador ante la OTAN, precisó que algunos aspectos desarrollados por los oradores españoles eran bastante novedosos para sus interlocutores atlánticos, como los datos comunicados sobre la reorganización en curso del Ejército de Tierra y la amplitud de algunos de los programas de modernización aprobados.

La delegación atlántica, que presidía el británico Michael Bell, secretario general adjunto de la OTAN, se mostró "sorprendida", según Ojeda, "por el grado de preparación de las Fuerzas Armadas españolas, incluido el Ejército de Tierra"', considerado hasta ahora como el más anticuado de los tres.

Preguntado, después de la sesión, sobre si había salido a relucir el delicado tema de Gibraltar, Ojeda se limitó a responder que "siempre estaba presente", antes de señalar que en ningún momento había sido evocada la negociación paralela entre Madrid y Washington sobre la reducción de la presencia militar norteamericana.

El jefe de la delegación española fue mucho más explícito a la hora de elogiar a Michael Bell y a sus compatriotas británicos, de los que aseguró que se olvidaban de su nacionalidad y de los intereses del Reino Unido para comportarse "como escrupulosos funcionarios internacionales de una calidad insuperable".

Ninguna fecha ha sido aún fijada para la celebración de la próxima reunión aunque Ojeda anticipó que probablemente no tendría lugar antes del año próximo y precisó también que no había una perioricidad prevista para los encuentros.

Tras recordar que el ajuste de Francia en el seno de la Alianza había durado 10 años y el de la República Federal de Alemania cinco, el embajador rehusó pronunciarse sobre la duración de la negociación, aunque vaticinó que el planeamiento del papel de España en la defensa común podría tardar un año.