Un pesquero vasco se hundió frente al cabo de Palos

Un pesquero vasco se hundió en la tarde del jueves tras sufrir un incendio cuando faenaba en el mar Mediterráneo, frente al cabo de Palos, a 62 millas de la costa murciana. Los siete tripulantes del Nuevo Balenciaga, que no sufrieron daño alguno, fueron rescatados por un barco de Cartagena. Según el patrón del pesquero, que tenía base en el puerto de San Sebastián, "el fuego pudo comenzar al recalentarse algún alternador de la sala de máquinas".El incendio se inició alrededor de las tres de la tarde, cuando los tripulantes se encontraban durmíendo. Al advertir el humo, los pescadores intentaron sofocar el fuego con los tres extintores que había en la embarcación; pero tras comprobar que no se podía bajar a la sala de máquinas y que el fuego había comenzado a propagarse por todo el barco, optaron por abandonarlo. Los siete tripulantes se larizaron al mar en las balsas salvavídas, no sin antes avisar por radio a los cuatro barcos que se encontraban faenando en las cercanías.

Tres barcos acudieron en auxilio de la tripulación del Nuevo Balenciaga y fue el pesquero Hernández Llorca, con base en Cartagena, quien recogió a los siete marineros y los trasladó a tierra, donde llegaron a las cuatro de la madrugada. Antes de abandonar el barco, el patrón, Domingo Urtigoena, tuvo el tiempo justo para recoger las cartillas y documentaciones de los tripulantes, pero no pudo salvar la ropa y el resto de enseres.

Desde las lanchas salvavidas los pescadores intentaron de nuevo reducir las llamas. La tripulación desistió del intento, "ya que al no haber viento y estar el mar en calma el humo no desaparecía e impedía ver el barco", dijo el patrón del Nuevo Balenciaga. El barco estuvo ardiendo durante cuatro horas y se hundió a las 19.30.

Trasladados al puerto de Cartagena, los tripulantes del pesquero vasco fueron atendidos en la casa del pescador y en el Instituto Social de la Marina. Cinco de los tripulantes salieron anoche en dirección a San Sebastián, mientras que otros dos se dirigieron a Alicante, según un portavoz del Instituto Social de la Marina.