El presidente del PDP de Cantabria, al borde de la expulsión del partido
El presidente del PDP de Cantabria, Ambrosio Calzada, generador de la nueva crisis que sacude a los conservadores de la región, se halla en la cuerda floja y, quizá, en el umbral de su definitiva defenestración política si, como parece probable, resulta expulsado del partido. Mientras, el presidente del Gobierno de Cantabria, Ángel Díaz de Entresotos, se concede una tregua aprovechando el fin de semana, que ha dedicado a su familia y a un almuerzo con compañeros de sus años escolares.
La dirección del PDP había dispuesto que los cinco diputados democristianos votaran a favor de la candidatura de Roberto Bedoya, de Alianza Popular, para el Senado, y su abstención motivó que resultara elegido el socialista Isaac Aja. Tan flagrante desobediencia, en la que también está incurso el ex presidente del Gobierno regional José Antonio Rodríguez, recibirá el correspondiente y urgente castigo del comité de disciplina del PDP, y se da por seguro en Santander que la expulsión del partido de los cinco diputados, apartados ya del Grupo parlamentario Popular, es cuestión de horas. Muchos de los más fieles partidarios del presidente Calzada no dudan, a estas horas, de que sólo su desaparición de la escena política podría ayudar a recomponer, no sin fatiga, alguna pieza, del rompecabezas.
"Lo ideal sería que Calzada y los otros cuatro", ha dicho un portavoz del PDP en Cantabria, "renunciaran a sus actas en beneficio de los siguientes de la lista, pero este gesto sería demasiado generoso por parte de ellos. Nos conformamos con la expulsión, que Calzada no vuelva a la conspiración, que fue siempre regla de oro en su quehacer político".
"La situación que estamos viviendo me obliga a no permanecer en el silencio. Afortunadamente, hoy [ayer para el lector] es domingo y puedo darme un respiro antes de convocar a los medios informativos, lo que, posiblemente, haré mañana [hoy]", dijo ayer a EL PAÍS, negándose a cualquier valoración de los hechos, el presidente Díaz de Entresotos, quien, según los socialistas, estaría obligado a presentar la cuestión de confianza después de la muy delicada situación planteada al futuro de la Coalición Popular en Cantabria por la ausencia de los cinco diputados del PDP en el pleno del viernes último.
Aunque no se descarta la posibilidad de que Díaz de Entresotos termine por aceptar las dimisiones presentadas por el vicepresidente Martínez y los consejeros Del Río e Hinojal, los tres pertenecientes al PDP, es dudoso que de momento recurra a la cuestión de confianza. Si se produce, el ocaso político de Calzada, tratará el presidente del Ejecutivo de reconducir el tema, pese a las dificultades de la situación.
