El Barcelona ficha al inglés Lineker, su cuarto extranjero

El delantero de la selección inglesa Gary Lineker, máximo goleador del Mundial 86, con seis tantos, es desde ayer jugador del Barcelona. El club azulgrana pagará al Everton una cantidad -la cifra no se ha hecho pública- cercana a los dos millones y medio de libras esterlinas -alrededor de 600 millones de pesetas-. El traspaso lo cerraron en Londres el vicepresidente del Barcelona, Joan Gaspart, y Josep Lluís Núñez júnior. Lineker ha firmado por seis temporadas y se convierte en el cuarto extranjero en la nómina del Barcelona, pues el club ya tenía a Schuster, Archibald y el sustituto de éste, Hughes. El fichaje de Lineker está condicionado a que el Barcelona resuelva la situación de Schuster.Mientras el presidente azulgrana, Josep Lluís Núñez, convocaba a su junta directiva, Gaspart y su hijo cerraban a primeras horas de la tarde de ayer, en Londres, el fichaje del cuarto extranjero del club azulgrana. El fichaje se hizo público antes en Barcelona que en el Reino Unido y lo anunció el vicepresidente Nicolau Casaus.

Tanto Gaspart como Núñez júnior viajaron a la capital inglesa con una clara consigna: fichar a Lineker. Las prisas de la directiva barcelonista estaban motivadas por diferentes circunstancias. Por una lado, el deseo del técnico, Terry Venables, de dejar zanjado el tema antes de iniciar su período de vacaciones. Y, por otro, la necesidad que tenía Núñez de presentarse: el próximo 25 de julio ante la asamblea de compromisarios con un fichaje de relumbrón, y mucho más después del triunfo del ex barcelonista Diego Armando Maradona en el Mundial de México, donde se proclamó máximo goleador Lineker.

Lineker era un hombre deseado por Venables desde que el técnico azulgrana se planteó la necesidad de prescindir de Archibald y Schuster la próxima temporada. Los directivos azulgrana ya vieron en acción al goleador en vísperas de un trascendental Juventus-Barcelona, de la Copa de Europa, cuando se filtró que Venables había comunicado a Núñez su deseo de abandonar el club.

Las negociaciones del fichaje han sido lentas porque las tres partes implicadas -Barcelona, Everton y Lineker- se mostraron durante las mismas con escasos deseos de ceder en sus pretensiones.