Nuevos testigos declaran sobre el accidente en el 'pulpo' del Parque de Atracciones

El director y el jefe de mantenimiento del Parque de Atracciones de Madrid prestaron ayer declaración ante el Juzgado de Instrucción número 20 de Madrid, que instruye las diligencias en relación con el accidente ocurrido el pasa do 18 de mayo en el aparato conocido como el pulpo, en el que murió una niña de ocho años. José Vicente Zapater, titular del juzgado, manifestó que tres testigos presenciales del accidente, que también prestaron declaración ayer, aseguraron que la niña no salió despedida de la barquilla del pulpo en el momento en que el tentáculo alcanzo su punto mínimo, sino al rebotar, según informó Efe."La rotura del piñón del motor de la atracción produjo el descenso violento de uno de los tentáculos, que, al rebotar y por el fuerte impacto, lanzó a la niña y a su madre al vacío", dijeron los tres testigos. Éstos explicaron que de las cuatro barquillas que sujetaba el tentáculo averiado, las dos exteriores resultaron más afectadas por el impacto por estar desprotegidas y sin obstáculos. En una de ellas viajaba la niña que murió, con su madre, y en la otra, la niña que acababa de hacer la primera comunión, con una señora gruesa que la sujetó.

La avería del pulpo se debió a la rotura de una arandela de sujeción del motor que produce el movimiento de ascenso y, descenso de la atracción, según se desprende del informe pericial realizado por dos técnicos a instancias del juzgado.

Fernando Martínez Morata, abogado de la familia de la víctima, declaró que "es muy pronto para hacer cualquier conjetura sobre los posibles responsables del fallo mecánico". El director comercial del Parque de Atracciones, Antonio Castellano, precisó que la última inspección realizada por los organismos oficiales en el pulpo se realizó en el pasado mes de febrero.