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ELECCIONES, EL 22 DE JUNIO

Rojas Marcos rompe en el congreso del Partido Andalucista su silencio de cuatro años

Alejandro Rojas Marcos, ex secretario general del Partido Socialista de Andalucía, -ahora, Partido Andalucista (PA)-, habló en público por primera vez en cuatro años, desde que decidió retirarse de la política a causa de los descalabros electorales de 1982. En un discurso más emotivo que político, el líder andalucista dijo a los participantes, del VI Congreso Nacional de PA que hace cuatro años dimitió "por dignidad, por ser el responsable del desastre electoral", pero que con esa decisión se aseguró "la supervivencia y continuidad del partido".

Rojas Maircos confirmó que no encabezará la candidatura de su partido por Sevilla ni por otra capital y, al pedírsele explicaciones de su ausencia en las listas, adujo "razones políticas del partido", que no quiso concretar.

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La alocución de Alejandro Rojas Marcos a los 300 compromisarios del VI Congreso Nacional del PA se produjo en un emotivo ambiente y con interrupciones de prolongados aplausos. El discurso se produjo ante la petición de muchos militantes que querían que explicase por qué no se presentaba a las elecciones legislativas.

Rojas Marcos reiteró los motivos de su dimisión y de su "pertinaz silencio". "Mi actitud, mi dimisión, mis silencios", dijo Rojas Marcos, "son el mejor patrimonio que tiene el partido".

En otro momento dijo: "Los andalucistas somos los padres de la autonomía andaluza, aunque las madres sean ahora otras". Pidió apoyo para el candidato a las elecciones andaluzas, Luis Uruñuela.

El fracaso

La dimisión de Alejandro Rojas Marcos se produjo tras el fracaso del entonces PSA en las elecciones andaluzas de 1982. Este partido tuvo tres diputados en el Congreso en las elecciones de 1977 y cinco en las de 1979.

En la segunda legislatura consiguió formar grupo parlamentario a cambio de su apoyo a la investidura de Adolfo Suárez. Posteriormente, en la cuestión de confianza de septiembre de 1980 (meses después del referéndum del 28-F, en el que no se superó el 50% en todas las provincias andaluzas, para de ese modo poder optar a la autonomía por la vía del artículo 151 de la Constitución), el grupo andalucista volvió a apoyar a UCD a cambio de la promesa de Martín Villa de reconducir la autonomía a través del artículo 144 y con normas parecidas a las del 151.

UCD se volvió atrás meses después, al no tener mayoría en la Asamblea de parlamentarios andaluces, lo que supuso un durísimo golpe para el PSA.

El PSA celebró en 1984 su V Congreso, en el que abandonó el término socialista y se decantó hacia posturas más nacionalistas. Pese a su escasa representación -tres diputados autonómicos-, los andalucistas fueron los autores del 17% de las iniciativas parlamentarias.

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