_
_
_
_
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

De hospitales

Con verdadera indignación y asombro he leído el artículo de Ignacio Carrión, publicado en EL PAÍS del domingo 16 de marzo, titulado Fábricas de dolor, en el que se dicen tantas barbaridades que yo, que llevo cinco años trabajando en distintos hospitales como enfermera, me he llegado a preguntar: ¿seguro que yo trabajo en un hospital?Creo, señor Carrión, que cuando uno se dispone a escribir sobre el funcionamiento de un hospital, si se es un verdadero profesional, uno se debe informar, visitar muchos hospitales y dar una visión que incluya defectos y virtudes.

Y si no se hace esto, pienso que se debe dar el nombre del hospital que ha visitado y el nombre de las personas que trabajan en él y que, por lo visto, son tan incompetentes, y en ningún caso, si se quiere decir la verdad, generalizar, porque, señor Carrión, en los hospitales de la Seguridad Social en los que he trabajado jamás he visto que los familiares duerman en el suelo; los goteros que utilizamos, aunque se acaben, no producen embolias, ya que, al dejar de entrar suero, la sangre, por diferencias de presión, refluye; no he visto a mujeres de la limpieza que dividan la basura en mía o en tuya, y mucho menos que la limpien los médicos; las enfermeras no nos ponemos a hablar en medio del pasillo como si fuésemos putas baratas, y desde luego no vamos con minifalda; los familiares van a las horas de la visita y, por tanto, parece dificil que hagan todas esas actividades que usted les atribuye, y, sin embargo, no habla de aquellos familiares que traen al enfermo infinidad de alimentos que transgreden la dieta, que besuquean constipados a un niño recién nacido o que llevan sus tertulias familiares alrededor de recién operados.

Por eso, señor Carrión, en un hospital no hay ni tan malos ni tan buenos; creo que hay verdaderos profesionales y también ineptos, hay familiares que sólo perjudican al enfermo y otros que son un apoyo moral. Flor tanto, como profesional de la información que usted es, informe, no deforme. Todos, enfermos y profesionales, se lo agradeceremos.-

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

ATS.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_