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Patti Davis

La hija de Reagan escandaliza con una novela autobiográfica que ridiculiza a la primera familia de Estados Unidos

Francisco G. Basterra

Se llama Patti Davis. Tiene 33 años, unas piernas largas, cabellera castaña en cascada y boca grande y sensual, atributos que ayudan, pero que no la harían famosa. Pero ocurre que es la hija de Ronald Reagan y de Nancy; en 1974 se quitó el apellido Reagan y adoptó el nombre de soltera de su madre para superar una crisis de identidad, y ha provocado un pequeño escándalo al publicar una novela autobiográfica titulada Home front.

La obra, que no pasará a la historia de la literatura, cuenta la vida de una joven rebelde, cuyo padre, ex gobernador de California, llega a presidente. Patti, Beth Canfield en la novela, se presenta como una activista universitaria, partidaria del amor y no de la guerra, amante de la marihuana y contraria a la guerra de Vietnam.La novela relata la vida de los Canfield y tiene como polémico fondo la guerra en el sureste asiático. El padre de familia, Robert, es un personaje afable y simple que se alimenta espiritualmente de citas del Readers Digest, la lectura preferida de Reagan, y emite declaraciones ultramontanas contra el aborto y los pacifistas. La madre, Harriet, es estirada, sólo se preocupa por los trapos de alta costura y está obsesionada por llegar a la Casa Blanca para redecorarla. Los Canfield no comprenden a su hija Beth, que se rebela contra unos progenitores distantes, egoístas, que sólo piensan en realizar su ambición política. Home front, que ha vendido ya más de 100.000 ejemplares, a 16 dólares el volumen, es el último chisme de Washington.

La aparición de la célebre autora en dos programas de televisión para promocionar Home front fue cancelada la pasada semana a última hora. Se sospecha que por presiones de la Casa Blanca, lo que ésta ha negado. Nancy, en principio, se negó a leer la obra de su hija, que cuenta, por ejemplo, cómo perdió la virginidad a temprana edad e ilustra su descubrimiento del sexo con frases como ésta: "Me tocó en sitios que hicieron que mi cuerpo se estremeciera". Luego parece que la ha leído, pero su secretaria de prensa se ha negado a revelar su reacción. Su padre ha encajado la aventura literaria de Patti con más deportividad y ha comentado que "es ficción y es una novela interesante, en la que cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. Espero que gane dinero con ella". Patti ha afirmado que este juicio le parece estimable, "ya que su gusto por la ficción se reduce habitualmente a novelas del Oeste".

Aunque el marido de la hija de Reagan, un profesor de yoga llamado Paul Grilley, confesó que "no sabía que Patti fuera capaz de escribir un libro", ésta quiere llevar Home front a la televisión y ya planea escribir una segunda novela, una intriga política. En su primera obra, Patti Davis ha sido ayudada por la escritora Maureen Strange Foster, que aparece como coautora del libro. La oveja negra de los Reagan se defiende: "Cómo podría haber presentado al personaje de la madre sin que Nancy resultara herida. He descrito una madre, podría ser ella o cualquier mujer de los años sesenta o setenta. Creo que el personaje es muy simpático y divertido en sus esfuerzos por tratar de identificarse con sus hijos utilizando su lenguaje y equivocándose cada vez que lo hace".

"Creo que tienes derecho a hacer cosas creativas con tus experiencias", explica Patti, que asegura que es cierto que sus padres están muy alejados de sus hijos: "Alguien con ambición presidencial es una persona remota. De algún lado tiene que distraer la atención y la energía". Niega que esté explotando su situación familiar. "El libro hubiera sido muy aburrido si hubiera hecho a mi padre conductor de camión".

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