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Gerald Grosvenor

El duque de Westminster pierde 530 millones de pesetas por decisión del Tribunal de Estrasburgo

Gerald Grosvenor, de 34 años, uno de los hombres más ricos del Reino Unido, propietario de los mayores latifundios de Inglaterra y Gales, acaba de perder 2,5 millones de libras en propiedades, según la sentencia dictada el viernes pasado por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo. Una cifra ridícula, ya que su fortuna familiar se calcula en más de 1.000 millones de libras (211.000 millones de pesetas). Los terrenos e inmuebles de los que ha sido desposeído se convirtieron el siglo pasado en los lujosos barrios de Belgravia y Mayfair, al oeste de Londres.

El litigio se inició en 1967 con la reforma de la ley de arrendamiento realizada por el a la sazón Gobierno laborista de Harold Wilson. Durante el proceso, el joven insistió en que la razón fundamental del litigio no era el dinero sino los principios. Gerald es poco amigo de las entrevistas y los ecos de sociedad, aunque hizo una excepción el día de su boda.Los 2,5 millones de libras (unos 530 millones de pesetas) es la cifra que calcula el propio duque de Westminster que ha perdido por la venta forzada de 80 casas. Este patrimonio familiar se originó en 1667 cuando Thomas Grosvenor, antepasado de Gerald, se casó con Mary Davies, hija de un scrivener (memorialista), que aportó a la familia lo que entonces eran tierras de labranza. En el siglo pasado estos terrenos se convirtieron en los barrios residenciales de Belgravia y Mayfair, ubicados al suroeste de Londres, al "sino tiempo que su propiedad pasaba de padres a hijos.

El actual duque los heredó en la década de los setenta, justamente cuando empezaban los problemas con los arrendatarios y el Gobierno.

Las propiedades del sexto duque de Westminster, cabeza de una poderosa familia de la aristocracia inglesa, se extienden por todo el Reino Unido, Hawai, Los Ángeles, San Francisco y Chicago. Aunque no tiene vínculos sanguíneos con la familia real británica, el duque de Westminster pertenece al círculo de contertulios de los palacios reales británicos. Su boda, celebrada hace tres años, congregó a varios miembros de la monarquía y constituyó el acontecimiento más vistoso y público del momento.

Gerald Grosvenor contrajo matrimonio en aquella ocasión con una inglesa rubia sin ascendencia nobiliaria. La pareja es poco dada a las fiestas y actos sociales que suele protagonizar los miembros de la alta sociedad en Gran Bretaña.

'Rabieta de niño'

La sentencia dictada por el Tribunal de Derechos Humanos puede servir de precedente para otros procesos judiciales que tiene emprendidos el duque.El que ahora acaba de perder se inició en 1967, cuando el Gobierno laborista realizó una reforma de la ley de arrendamiento. Mediante esta norma, revisada en 1974, se intentó abolir los arriendos desorbitados y se indujo a algunos arrendatarios a comprar casas, que ellos hubiesen construido o cuyos terrenos hubiesen sido arrendados durante más de 21 años.

El precio de estas adquisiciones se fijó ligeramente por debajo del que marcaba el mercado, y en el caso del duque de Wesuninster se le obligó a vender 80 cáas de los barrios citados anteriormente con unas pérdidas que él calcula en .530, millones de pesetas. Ante el desacuerdo con la aplicación de esta ley, el duque acudió hace seis años al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que finalmente ha dictado sentencia a favor de la legislación británica que introdujeron los laboristas.

Algunos sectores de la Prensa británica han considerado "una rabieta de niño" el reciente litigio promovido ante el Tribunal de Estrasburgo por un asunto de 80 casas, ya que éstas constituyen una minúscula parte del patrimonio familiar del duque de Westmister, valorado en más mil millones de libras (211.000 millones de pesetas).

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