Pierre Parodi
Discípulo cristiano de Gandhi y sucesor de Lanza del Vasto
El traje que viste Pierre Parodi, sucesor de Lanza del Vasto, es de pura lana, tejido de manera artesanal en la comunidad de la Borie Noble, en Francia. Nacido en Burdeos hace 51 años, Pierre Parodi, médico de profesión, conoció a Lanza del Vasto en 1945, "después de la guerra", en una época en la que él, como otros jóvenes, se preguntaba el porqué de las contiendas bélicas. Identificado con Gandhi, Parodi se incorporó a la comunidad en 1954. Un estilo de vida natural y simple, inspirado en la práctica de la no violencia.
Admite Pierre Parodi que su vestimenta puede ser más cara y en cierto modo más elitista que la de la gente que se abriga con fibras artificiales elaboradas en serie. Pero afirma que "lo que se hace con las manos y con placer no tiene precio. La economía moderna destruye la calidad y la belleza", añade sonriente. Eso no significa que el Arca esté contra el progreso científico, "pero hay que preguntarse hacia dónde va ese progreso, a quién aprovecha y cuáles son sus consecuencias. Un progreso que favorezca la cantidad antes que la calidad no nos interesa, pero si conduce a una mayor calidad de vida y beneficia a todos, estamos de acuerdo".En la comunidad de la Boire Noble, asentada encima de una colina, viven 150 personas, pertenecientes también a otras dos comunidades anejas. El Arca tiene otras comunidades, dos de ellas en España. La vida cotidiana gira en tomo al trabajo, generalmente rural y manual, "aunque damos mucha importancia a la fiesta". No hay asalariados ni jefes, y el nivel de vida es austero, aunque "tratamos de que sea confortable". Su máximo lujo es no tener lujos. Ni la televisión ni el afán de competir o prosperar perturba a los miembros de la comunidad. Pero su desconfianza hacia los adelantos modernos: lavadoras, agua corriente, electricidad, etcétera, da un tinte pintoresco a sus casas. No obstante, Parodi explica que la electricidad no es un tema tabú, y recuerda que en la comunidad de Bonnecombe se opera con electricidad, si bien las instalaciones, así como las turbinas, son de fabricación propia. "Nuestro modelo no es la Edad Media", asegura.
La no violencia inspira la reflexión y acción de los Amigos del Arca en todos los campos: alimentación, medicina, relaciones personales y profesionales, etcétera. Una filosofía que tiene una traducción política inmediata. Los Amigos del Arca son ecologistas y pacifistas, están cerca de los verdes, no se identifican con los partidos de izquierda ni de derecha -aunque rechazan expresamente los totalitarismos- y se oponen radical y activamente a la política armamentística y de bloques. En España han apoyado desde primera hora la salida de la OTAN y han protagonizado ayunos para pedir el referéndum.
Pese a su militancia a favor de la objeción de conciencia, "no pensamos que los militares sean los responsables de la guerra; la responsabilidad es compartida: hay una relación lógica entre la búsqueda del poder y de la riqueza y la génesis de la guerra, y eso vale para el Este y el Oeste". Parodi llega a decir que los bloques conducen a una suerte de terrorismo internacional. "Los terrorismos minoritarios y los actos de piratería y secuestro se basan en el mismo principio: la amenaza a la población inocente".
Está casado con Teresa, que también pertenece al Arca, y tiene dos hijos. "La fidelidad amorosa es un valor importante en la comunidad del Arca. Creo que la actual trivialización del amor, frecuente en ciertos sectores de la vida urbana, sólo denota insatisfacción". De nuevo insinúa Parodi que el amor progresa más en el campo que en la ciudad.
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