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Clemente fue destituido "por asumir competencias de la directiva y por incumplimiento de un pacto con Sarabia"

El Athlétic de Bilbao hizo pública anoche una nota oficial donde cita como principales razones del cese del entrenador, Javier Clemente, el incumplimiento del pacto de no agresión al que había llegado con el jugador Sarabia -auspiciado por la junta directiva el pasado mes de octubre- y el haberse arrogado competencias que no le correspondían. En una conferencia de prensa, el portavoz del club reveló algunos datos no conocidos. Entre ellos, que "a comienzos de la presente temporada solicitó reiteradamente la rescisión de su contrato porque tenía una sustanciosa oferta de otro club", presumiblemente el Real Madrid, que, según otras fuentes consultadas, había ofrecido una ficha de 70 millones al técnico bilbaíno.

La conferencia de prensa, celebrada en las dependencias del club en una sala abarrotada de informadores, comenzó con la lectura por el portavoz del Athlétic, José María Arrate, de un largo escrito que resultó ser una cronología del conflicto con escasos datos nuevos. El presidente, Pedro Aurtenetxe, no asistió. José María Arrate se presentó acompañado de unos pocos directivos y fue él quien respondió a casi todas las preguntas de los periodistas.El comunicado de la junta daba algunos detalles de las conversaciones entre el entrenador y la directiva. Concretamente explicaba que, preguntado si sabiendo que una final de Copa se ganaría con Sarabia y se perdería sin él lo alinearía, Clemente contestó que no.

En el escrito se dan dos causas para la destitución: a) desobediencia a la directiva e incumplimiento del pacto "entre caballeros" por el que Clemente y Sarabia se comprometían a no hacer declaraciones sobre el conflicto que les separa, pacto claramente roto por el entrenador al final del partido contra el Hércules, en San Mamés, hace diez días; y b) asumir competencias propias de la directiva al prescindir de forma absoluta de un jugador. La directiva entiende en su nota que hacer algo así es más que tomar una decisión de orden técnico, y que suponía en la práctica la expulsión del jugador del seno del club, algo para lo que sólo la directiva está facultada.

Declaraciones

Igualmente, la nota recogía la carrera de declaraciones de Clemente durante la semana pasada: "No voy a contar más con Sarabia"; "hay razones superimportantes que no las saben ni la directiva ni Sarabia"; "tengo absolutamente toda la razón"; "la reconciliación con Sarabia es imposible"; "si gana Sarabia, yo saldré del Athlétic".

Con la exposición de estas declaraciones, la Junta daba a entender que el entrenador no había dejado otra salida que su destitución.

En su lectura, el portavoz detalló todos los pasos dados la noche del viernes al sábado y que culminaron con la destitución del entrenador. La única novedad al respecto fue la confirmación de algo que ya adelantó hace unos días Radio Popular de Bilbao: que la plantilla amenazó con un plante, consistente en no desplazarse a Barcelona para el partido de Liga, en el caso de que se consumara la caída de Clemente. La directiva llegó a tenerlo todo dispuesto por si era preciso desplazar a los jugadores del filial, Bilbao Athlétic. Los jugadores dijeron a la directiva, siempre según el portavoz, que igual actitud habrían adoptado en el caso de que fuese Sarabia el despedido.

Asimismo, el escrito leído por José María Arrate explicaba que Clemente, en la nota que ofreció como contrapropuesta a la que el viernes por la noche le exigía la directiva que firmara, no se retractaba de sus declaraciones anteriores.

Uno de los aspectos más sorprendentes de las explicaciones ofrecidas por el portavoz es el relativo a las razones de la sanción económica -cuya cuantía no precisó- al jugador Sarabia. La "alteración de la convivencia del grupo" de que habla el comunicado oficial no parece basada en ningún hecho comprobado, ni siquiera en declaraciones en tal sentido de los jugadores o cualquier otra parte implicada, sino únicamente en la "presunción de que tal cosa haya podido darse". Forzado a aportar detalles más concretos, el portavoz se limitó a decir que hubo algunos gestos, que podrían interpretarse como despectivos, en ocasiones en que Clemente comunicaba a Sarabia que no figuraba en la alineación titular. Pero insistió en que se trataba sólo de "presunciones, y no de hechos comprobados".

En cualquier caso, quedó claro que la multa no se le ha impuesto al jugador por desobedecer las consignas del técnico, contra lo que se había pensado.

Sarabia, por su parte, declaró, tras haber escuchado por radio la lectura del comunicado de la junta: "Acepto disciplinadamente la decisión de sancionarme y rehúso entrar en cualquier tipo de valoraciones. Lo único que quiero es olvidarme de todo esto y dedicarme únicamente a entrenar para ayudar al Athlétic a conseguir nuevos triunfos". En relación con su convivencia con el resto de la plantilla, dijo: "La normalidad y cordialidad que han presidido nuestras relaciones estos días me confirman que por este lado no habrá ningún problema".

Clemente ha convocado una conferencia de prensa para hoy.

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