Corbalán jugará lesionado frente al Limoges
El Real Madrid disputa hoy frente al Limoges, francés, a partir de las 18.45 horas y en la capital española, el primer encuentro de la fase final de la Copa de Europa. Lo hace bajo el síndrome de las dolencias del base Juan Antonio Corbalán, sobre las que parecen descansar en estos momentos las posibilidades del equipo madridista. Corbalán, que jugará lesionado, se siente disminuido y reconoce que últimamente no siente placer al jugar, sino mucho dolor. Lolo Sainz se ha mostrado excesivamente cauto al hacer pronósticos.La lesión de Corbalán puede tener su origen en la tendinitis que sufrió en la rodilla el pasado año y que le obligó a operarse. Al forzar sobre el pie derecho se le ha producido una fuerte molestia en la planta. La arrastra desde principios de temporada, pero no ha podido parar; sufre fuertes dolores que, después de algunos partidos, aumentan y le impiden incluso apoyar el pie en el suelo. Corbalán no se siente Corbalán últimamente.
"Me tengo que reservar e incluso arropar en mis compañeros, y no es mi costumbre, porque no me gusta desinhibirme", afirma.
El pesimismo crece cuando se plantean soluciones: una es que el base pare de jugar, pero es que es el único base disponible para la Copa de Europa (el hispano-soviético Biriukov no tiene aún autorización de la FIBA); otra, que se opere, pero teme que, al abrir, encuentren alguna lesión más complicada.
Sainz sabía que arriesgaba con Corbalán en Copa de Europa, y le ha salido mal. Por ello, incluso, planificó este torneo de forma distinta, buscando asegurar desde el principio para esperar que el base se recuperara. Así, le vino bien un primer encuentro en el pabellón y con un rival muy asequible, el Limoges. Corbalán jugará hoy mermado, al igual que Fernando Martín, con dolencias en el tobillo. El futuro a corto plazo es imprevisible.
Así, la Copa de Europa adquiere caracteres dramáticos para el Madrid, porque puede complicarse en exceso su aspiración de ser finalista. El Limoges es el equipo francés con mejor plantilla, ganador de la Copa Korac en 1982 y 1983 y campeón de Liga en las últimas cuatro temporadas. El Limoges se ha reforzado a conciencia esta temporada, aunque su trayectoria en la Liga no es brillante: luce, sobre todo, su recién adquirida potencia en el rebote, aunque parece conservar ciertas tradiciones del baloncesto francés, como su falta de constancia y su secular irregularidad.
Nuevos fichajes son los del pivote internacional francés Stefan Osterowsky (2,04), con poca envergadura pero muy luchador, el ex barcelonista Mike Davis (2,10) y el alero William Knight (1,98). Cuenta, también, con internacionales franceses como Dacoury (1,95), Senegal (1,84) y Brostherhaus (2,05). Es un equipo con momentos brillantes y espectaculares caídas de tensión, que le convierten en asequible para un Madrid frío y calculador.
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