Sergio Casal y Emilio Sánchez ganaron el torneo Godó de dobles
La pareja española formada por Sergio Casal y Emilio Sánchez se adjudicó ayer el torneo Godó en la prueba de dobles. Casal y Sánchez vencieron en la final al danés Mortenssen y al sueco Gunnarsson por un doble 6-3. Previamente habían eliminado a los ganadores del año pasado, los checos Slozil y Smid, por 6-3, 4-6 y 6-2. Hoy (12.00, TV-1) se enfrentarán en la final individual el sueco Mats Wilander, ganador de las tres últimas ediciones y que ayer eliminó al argentino Martín Jaite por 7-5 y 6-3, y el francés Tulasne, que ayer, sorprendentemente, derrotó a su compatriota Leconte por 6-3 y 6-2.
El torneo Godó no veía el triunfo de una pareja española desde 1972, cuando vencieron los históricos Manuel Orantes y Joan Gisbert. Ayer, Emilio Sánchez y Sergio Casal rompieron la mala racha y sumaron unos puntos muy importantes en la carrera contra reloj en la que de pronto se han visto implicados. Ni siquiera ellos podían pensarlo hace unos meses, pero ayer se colocaron en el noveno puesto de la clasificación mundial de dobles, y sólo necesitarían ganar una posición más para el Masters en Nueva York.El partido de ayer era la séptima final del año para Sergio y Emilio, y se convirtió en su cuarto triunfo, tras Marrakesch, Kitzbuhel y Ginebra. Los dos españoles tuvieron en la final su partido más fácil, porque Gunnarsson y Mortenssen forman una pareja mucho menos experta que Leconte-Noah, Wilander-Gullikson y Slozil-Smid, a los que vencieron en las tres rondas anteriores.
El doble ha sido una especie de escapatoria para Sergio Casal y Emilio Sánchez. Este ha sido el primer año que han jugado juntos y en serio, y ya han ganado más de cuatro millones de pesetas cada uno. Ayer se embolsaron casi un millón de pesetas cada uno por su triunfo.
La presencia de Thierry Tulasne, que eliminó ayer al favorito Henri Leconte, en la final de hoy se ha convertido en la sorpresa del torneo. Tulasne, que era una cabra loca del circuito porque golpeaba la bola sin dirección, ha conseguido sacarse de la cabeza la teoría de que le faltaba magnesio en el cuerpo, al demostrarle los doctores qué la pérdida de fuerza física que le llegaba en los últimos años en los partidos largos sólo se debía a su tremenda tensión nerviosa.
El partido más igualado fue el que enfrentó a Martín Jaite y Mats Wilander. Jaite es un tenista muy inteligente, y acertó en la primera manga imprimiendo rapidez a su juego y desbordando a Wilander con bolas muy profundas.
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