El Sindicato Libre Ferroviario niega que haya oposición a su integración en UGT

Tomás Martínez, hasta hace poco secretario general del Sindicato Libre Ferroviario (SLF), hoy integrado en UGT, negó que existiera un rechazo de las bases de esta organización para su incorporación a la central socialista, afirmando, por el contrario, que se trataba de "resentidos apoyados por CC OO, que no han aceptado una decisión democrática".El SLF decidió en 1984 su integración en otra organización sindical, tomando contacto con CC OO y UGT. El primero de estos sindicatos, según Martínez, no aceptó que conservaran sus siglas ni les ofreció participación en los órganos de dirección, por lo que llegaron a un acuerdo con UGT, que sí les permitió conservar su denominación y una participación del 30% en las ejecutivas.

Posteriormente, un sector del SLF promovió una asamblea general en la que se disolvió a la ejecutiva -que ya estaba integrada en UGT- y se nombró una comisión gestora. Esta asamblea, según Tomás Martínez, se celebró de forma "absolutamente irregular y con escasa participación. Sus decisiones carecen de validez".

La incorporación del SLF en UGT da mayoría absoluta a la central socialista en el comité intercentros de Renfe, y esta podría ser la razón, según fuentes sindicales, de que CC OO apoye a los disidentes del antiguo Sindicato Libre Ferroviario.