General Motors intercambiará con ENASA en los próximos días un nuevo documento que prorrogará su interés por la empresa española
La multinacional norteamericana de automoción General Motors (GM) y la Empresa Nacional de Autocamiones (ENASA) intercambiarán en los próximos días un nuevo documento que servirá para prorrogar el denominado Memorandum of Undestanding (MOU) que ambas empresas firmaron en enero y por el que la compañía estadounidense expresaba su interés en adquirir la mayoría del capital de la firma española.Mediante el nuevo documento, que será firmado primeramente en una de las capitales (Madrid o Detroit) para ser enviado luego a la otra para su rúbrica, la primera compañía automovilística norteamericana se reserva el derecho de tanteo en el caso de que ENASA llegue a un acuerdo con otra firma para la venta de la mayoría del capital de la sociedad. Este derecho de tanteo, establecido en el primer MOU, expiraba el 30 de junio.
Mientras tanto, el accionista único de ENASA-Pegaso, el Instituto Nacional de Industria (INI), prosigue las negociaciones con otras firmas multinacionales del sector para buscar un socio financiero que, además de compartir riesgos, aporte tecnología y la posibilidad de una red comercial en el mundo. Un directivo del INI, Javier Álvarez Vara, estuvo la semana pasada en Tokio, donde mantuvo negociaciones con Toyota, con el fin de determinar el interés sobre ENASA de la primera empresa japonesa del sector.
Según fuentes fidedignas, Toyota sigue interesada en invertir en España y, más concretamente, en ENASA, pero no de una manera inmediata. Mucho más débil es el supuesto interés de la segunda compañía japonesa, Nissan, cuya actividad en España está centrada en el subsector de los vehículos industriales ligeros, a través de su inversión en Motor Ibérica.
La Empresa Nacional de Autocamiones, fabricante de los vehículos Pegaso, ha adolecido históricamente de un socio que, además de compartir riesgos de inversión, aporte la tecnología suficiente para garantizar la viabilidad de la empresa a medio y largo plazo. Hace unos cuatro años, ENASA pareció encontrar ese socio en la firma norteamericana International Harvester (IH), con la que incluso llegó a firmar un acuerdo definitivo, pero los problemas financieros de esta sociedad acabaron con el sueño dorado.
Colaboración tecnológica
Con todo, IH aportó a los centros propios de investigación y desarrollo de ENASA un abanico de posibilidades tecnológicas y acuerdos que permitieron enriquecer la gama de productos Pegaso. Con estas mejoras, una ampliación de la red comercial mundial de la compañía y varios contratos de ventas a países africanos y americanos, ENASA ha conseguido garantizar a corto plazo su viabilidad, pese a que en el ejercicio pasado acumuló pérdidas del orden de los 3.500 millones de pesetas.La desfavorable evolución del mercado interior de camiones y furgonetas durante los primeros meses de este año hace temer, sin embargo, por el inmediato futuro de esta sociedad, que busca un acuerdo con GM, Toyota u otra firma multinacional que le permita adquirir un tamaño que, en economía de escala, la convierta en una sociedad eficaz y más competitiva. Las negociaciones con GM sobre la elaboración de un plan industrial a largo plazo (10 años) caminan en ese sentido.
Por su lado, la multinacional norteamericana, que ha registrado una cifra de beneficios récords en los últimos trimestres, busca ampliar su presencia y base europea en la gama de los vehículos pesados. Aprovechando su fabuloso cash flow, trata de buscar en el sur europeo una base que le permita alcanzar las cuotas de mercado de que ya dispone en otros lugares. El problema fundamental en esta estrategia es la propia situación del mercado, muy deprimido en los dos últimos años, y que aconseja meditar cualquier decisión definitiva.
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