Sólo 7.000 personas asisten en México al partido amistoso entre Italia e Inglaterra

Siete mil personas únicamente acudieron al encuentro amistoso entre las selecciones nacionales de fútbol de Inglaterra e Italia, disputado en el estadio Azteca, de México, con capacidad para 120.000 espectadores. El encuentro, el primero que disputaban jugadores ingleses e italianos desde la final de la Copa de Europa (Liverpool-Juventus), acabó con victoria italiana por 2-1, gracias a un penalti injustamente señalado. La Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) decidió ayer autorizar a dos equipos ingleses a que concluyan sus giras por otros países, iniciadas antes de la sanción.

La tragedia de Heysel, donde los incidentes fueron en las gradas y no en el césped, acarreó un fuerte despliegue policial y el retraimiento de los aficionados en el cuentro de México. Varios miles de policías colocados fuera y dentro del estadio registraron a cada, aficionado que asistió al partido. Acudió un centenar de italianos, con una bandera de la Juventus; mientras que los únicos ingleses estaban sobre el césped. Se guardó un minuto de silencio en memoria de las 38 víctimas de Bruselas.Las dos selecciones estuvieron muy afectadas por el calor y la altura de la ciudad (2.225 metros). Conocer la reacción de los jugadores en esas condiciones era el objetivo de la expedición italiana, ya que el próximo año deberá disputar en la ciudad de Puebla la primera fase del Mundial 86. En el estadio Azteca, el marcador no se movió hasta el minuto 72, gracias a un buen detalle de Bagni; tres minutos después igualó Hateley, que juega en un club italiano, y a un minuto del final, Altobelli marcó de peinalti.

Tras el partido, el seleccionador inglés, Bobby Robson, manifestó: "Mi simpatías están con los jugadores y clubes que han quedado aislados del resto del mundo por culpa de una pequeña minoría de imbéciles ... esto va a desvastar al equipo nacional". Robson se refería así a la decisión de la FIFA de prohibir a los clubes ingleses jugar partidos oficiales o amistosos fuera de Inglaterra. Es decir, que tampoco podrán jugar en Escocia, Gales o Irlanda del Norte. La medida no afecta a la selección.

Dos excepciones

La FIFA ha hecho una excepción con dos equipos ingleses que se encontraban de gira. El West Ham está jugando en Japón y el Tottenham. Hostpur, en Australia. Los dos equipos cumplirán sus compromisos contraídos antes de la sanción de la FIFA.El secretario de la federación inglesa, Ted Croker, viajará la próxima semana a Zúrich, sede central de la FIFA, para presentar una apelación. Según los dirigentes de este organismo, no hay posibilidad de apelar, pero se escuchará a Ted Croker. La sanción para clubes ingleses fue aceptada por la primera ministra del Gobierno británico, Margaret Thatcher, aunque no fue tan bien recibida por los dirigentes futbolísticos.