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La medida de la música

Tan sólo media docena de tablas pueden dar cobijo al equipo de alta fidelidad

Es tan fácil como ensamblar media docena de tablas, y ya se tiene mueble a medida para el equipo de música.Se empieza cortando o haciéndose cortar las piezas (de aglomerado de 16 milímetros chapado en la madera que se quiera). Si se va a poner la parte posterior encajada, hay que hacer las ranuras correspondientes a un centímetro del borde posterior en las piezas laterales, superior e inferior y quitarles un centímetro de fondo a las demás; si se va a clavar no es preciso.

El tipo de ensamblaje más rápido, y sencillo es por medio de tirafondos para algomerado. Son tornillos fuertes con cabeza para llave Allen (hexagonal). Para ponerlos hay que hacer un agujero de ocho milímetros de diámetro en la pieza a través de la cual pasa un tornillo, y uno de seis milímetros de diámetro en la pieza donde agarra. La entrada del agujero grande hay que avellanarla (agrandarla) para que no sobresalga la cabeza del tornillo.

Por aquello de hacerlo un poco menos macizo, el mueble tiene un reborde que sobresale por encima de la primera balda, y un recorte en los laterales, a la altura de la de los discos, que se puede hacer fácilmente con una sierra de calar.

Entre las dos baldas que encierran los discos van unas varillas de metal (hierro o latón según el acabado que se quiera), que sirven para evitar que los discos se desmadren. Van encajadas en sendos taladros hechos en las baldas. Los taladros se hacen antes de montar las tablas.

La última balda, la inferior, va a cinco centímetros del suelo, y el hueco que queda va tapado por un zócalo. Así queda un espacio donde poner cuatro ruedas locas que permitan desplazar el mueble. Las ruedas deben ser de las que tienen una base plana atornillable. Use tornillos de rosca chapa con cabeza de gota de sebo (redondeada), que son los que mejor sujetarán las ruedas.

Una vez montadas las tablas, el mueble está acabado en su estructura. El cierre por detrás debe hacerse con contrachapado o táblex de cuatro milímetros de grueso. Si se encaja en ranuras, hay que ponerlo antes de cerrar por arriba el mueble; si se pone clavado, se puede dejar para el final.

Queda pegar en los cantos del aglomerado la cinta de cantear para que queden bien rematados. La preencolada, que se pega con la plancha, es la más cómoda de poner. Remate lijando todas las superficies con lija fina (400). Luego barnice, esmalte o la que, a su gusto. Nota: no olvide taladrar en la parte trasera un agujero grande (50 milímetros de diámetro) para sacar los cables.

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