Falleció durante una tregua al Gobierno, dice la viuda del dirigente de los GRAPO

, La muerte del dirigente de los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO) Juan Martín Luna se produjo en un momento en que esta organización había acordado "una tregua, en espera de la postura que adoptara el PSOE, que acababa de asumir el Gobierno", manifestó ayer a este periódico Emilia Romero, esposa del grapo fallecido. "Es más", añadió Emilia Romero, "Juan Martín Luna tenía prevista otra tregua".

La viuda de Martín Luna conoció el auto de procesamiento de los tres inspectores a media tarde, a su regreso de sus ocupaciones laborales, ya que trabaja en una contrata de limpieza en Cádiz, donde vive en compañía de sus familiares. Emilia Romero fue informada por la madre de Martín Luna, Carmen Luna, que conoció la noticia horas antes por un redactor de este diario.

La querella fue presentada poco tiempo después de la muerte de Martín Luna por su viuda y por los padres del fallecido, el matrimonio compuesto por Octavio Martín y Carmen Luna, los tres con domicilio en el mismo inmueble de la calle de Hércules, número 8, de Cádiz, donde residen, aunque en pisos distintos.

Esta querella, además de ir contra los inspectores David Juan León Romeo, de 34 años; Ángel Luis Adame Bernáldez, también de 34 años, y Valentín Martín Cabello, de 31, se entendía al entonces director del Mando Único para la Lucha Contraterrorista (MULC) Manuel Ballesteros, en ese momento ya prácticamente destituido como responsable de las unidades antiterroristas, cuyo procesamiento ha sido denegado. Estos tres inspectores pertenecían a la Brigada Regional de Información de Barcelona.

Emilia Romero manifestó que el juez pidió tres personas que certificaran que Juan Martín Luna era zurdo, ya que en la nota oficial que ofreció la policía se afirmó que sacó una pistola "del lado izquierdo" y habitualmente las armas se suelen desenfundar de forma cruzada, con la mano contraria al lugar donde se lleva. Según la viuda, fueron presentadas tres personas, "dos amigos de Juan, a los que no veía desde hacía muchos años, y don Francisco, un profesor suyo de la Escuela de Formación Profesional, de Cádiz", donde cursó sus estudios. "Los tres certificaron que Martín Luna era zurdo", indicó.

Tanto la viuda como la madre del dirigente de los GRAPO fallecido manifestaron que querían llegar hasta el final en este proceso y calificaron de "positiva" la decisión de la Audiencia Provincial de Barcelona, aunque no mostraron excesiva confianza en la resolución final.