Miquel Roca no tendrá cargos políticos en el Partido Reformista

Miquel Roca no será presidente ni secretario general del Partido Reformista Democrático, según informa la agencia Europa Press de medios cercanos al propio Roca. Sin embargo, los mismos medios precisaron que "Roca puede ser candidato del PRD a la presidencia del Gobierno".

Las fuentes consultadas pusieron como ejemplo, "con todas las salvedades", el caso del líder bávaro Franz Josef Strauss en Alemania, que, aún siendo líder del CSU -partido independiente del democristiano CDU-, fue candidato a la presidencia del Gobierno federal".

Roca Junyet no militará en el Partido Reformista Democrático, ni tampoco lo serán los afiliados del Convergencia Democrática de Cataluña (CDC). En tal sentido cabe reseñar que no habrá presencia de militantes de Convergencia como delegados en el próximo congreso del partido reformista, aunque sí "como invitados".

Sobre las relaciones entre el CDC y el PRD, Roca afirmó el jueves que ambos partidos serán soberanos y no sucursalistas. "Puedo apuntar que la voluntad es establecer un acuerdo político con el fin de definir una acción de gobierno conjunta en la política de Estado, sobre la base de sus respectivas fuerzas electorales", precisó el líder reformista en declaraciones a Avui y a La Vanguardia. "El acuerdo habrá de permitir la constitución de un comité de enlace que desarrolle y prepare las bases de esta acción de gobierno".

Sobre el referéndum de la OTAN, Roca señaló que si se realiza éste crearía un grave precedente constitucional. "Se puede aceptar un referéndum para revocar una decisión del Parlamento, pero no para confirmarla", añadió. "Es como si, cada tres años, se tuviese que revalidar todo lo que la soberanía popular, a través del parlamento, ha aprobado".

CDS y liberales de Camuñas

Por otra parte, miembros del CDS, de Adolfo Suárez, y dirigentes del Partido de Acción Liberal (PAL), de Ignacio Camuñas, han mantenido conversaciones durante los días pasados.El objeto de tales reuniones ha sido el estudio de las posibilidades de aproximación entre las dos formaciones políticas de cara a las próximas elecciones generales, previstas para 1986.