Seguidores del presidente Eanes crean un nuevo partido político en Portugal

Unos 150 representantes de la portuguesa Comisión Nacional para la Reelección del Presidente Eanes (CNARPE) lanzaron el sábado, en Abrantes -pequeña ciudad situada en el centro de Portugal- un nuevo partido político, de orientación socialdemocráta, tras celebrar una reunión para "analizar la situación política portuguesa" y "buscar una alternativa verdaderamente lusitana a la actual coalición de gobierno entre socialistas y socialdemócratas."Los rumores acerca de la inminente creación de un partido presidencialista o eanista que agitaron, periódicamente, los medios políticos portugueses desde 1978, parecen, esta vez, estar a punto de concretarse, pero en moldes totalmente diferentes de los previstos por los presidencialistas de la primera hora, entre los cuales se hallaba el fallecido líder socialdemócrata Francisco Sa Carneiro e influyentes personalidades del Partido Demócrata Cristiano (CDS).

El nacionalismo y la desconfianza hacia la clase política actualmente en el poder en Lisboa son los rasgos más característicos del movimiento que afirma profesar la ideología socialdemócrata.

El principal líder del movimiento, en esta fase de su organización, es el ingeniero agrónomo Herminio Martinho, amigo personal del general Ramalho Eanes y principal artífice de su candidatura al segundo mandato presidencial en la ciudad de Santarem, uno de los más fuertes bastiones del Partido Socialista Portugués.

Martinho, que criticó severamente la política económica y social del actual Gobierno, la desorganización, burocratización y corrupción del aparato del Estado, piensa que la única solución para ayudar, a Portugal a superar la crisis política, financiera y moral en que se encuentra sumergido consiste en movilizar y valorizar los recursos humanos y materiales del país. Según Martinho, hay que buscar soluciones originales y de acuerdo con los valores culturales y morales propios del pueblo portugués, en vez de perseguir el espejismo de los modelos ajenos.

La alternativa al poder actual es, ante todo, una alternativa ética y cultural, afirma Martinho, que comenta, con una cierta ironía: "Están muy engañados los que creen que queremos ser un segundo partido socialista: aspiramos, sí, a ser el primero".