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Fórmula 1

Enfrentamiento entre la federación internacional y Mónaco

La tensión entre el presidente de la Federación Internacional del Deporte del Automóvil (FISA), el francés Jean Marie Balestre, y el organizador del Gran Premio de Mónaco, larvada hace algún tiempo, parece haber aumentado desde la celebración de la polémica carrera monegasca y amenaza con romper la actual precaria estabilidad del Circo de la Fórmula 1. La razón del enfrentamiento, nunca reconocida por el presidente de la FISA, podría estar en el hecho de que Mónaco cedió la exclusiva de televisión a la NBC norteamericana, en perjuicio de la Federación Internacional y de Ecclestone.Balestre acusa al organizador de Mónaco, y al director de la carrera -el piloto belga Jacky Ickx- de haber interrumpido la carrera sin tener atribuciones y sin contar con los comisarios técnicos. La reglamentación vigente, sin embargo, contradice- la tesis del presidente de la FISA y otorga el poder de suspender una carrera al director de la misma. Curiosamente, el belga Jacky Ickx. fue propuesto, precisamente, por la FISA a los organizadores de la carrera monegasca. Además, los enviados especiales de la Federación Internacional aprobaron y firmaron el resultado final del Gran Premio de Mónaco, con la victoria de Alain Prost por delante del joven brasileño Ayirton Senna y del alemán Bellof, aunque, días después, posiblemente presionados por el presidente Balestre, se desdijeron.

El enfrentamiento entre la FISA y Mónaco parece haber entrado ya en el terreno personal, con graves acusaciones económicas y fiscales al presidente de la FISA, el francés Balestre. El resultado final, al margen de cómo se resuelvan finalmente esas denuncias, podría romper definitivamente los Acuerdos de la Concordia. Si los organizadores del Gran Premio de Mónaco se salen con la suya -como, por ahora, han hecho- y los derechos de televisión pueden ser transferidos a voluntad del organizador, Ecclestone y la FISA podrían perder una parte muy importante de sus altísimos ingresos económicos. Si, por el contrario, Mónaco es sancionado y expulsado del calendario -lo que no deja de ser improbable-, la carrera más prestigiosa de cuantas componen el Mundial podría seguir organizándose, pero al margen de la estructura de la FISA.

Los organizadores de la carrera de Montecarlo están dispuestos a seguir organizando su prueba en los años sucesivos, con la aprobación de la Federación Internacional o sin ella. En este último caso, Michel Boeri es consciente de que el montaje del Gran Premio de Mónaco sería más costoso. Pero los intereses nacionales y comerciales de la prueba del pequeño país de la Costa Azul están muy por encima, y el apoyo por parte del Principado es, al menos de momento, total.

Por otra parte, expertos internacionales comienzan a cuestionarse la posibilidad real de que el Gran Premio de Portugal se dispute este año. En teoría, la carrera portuguesa vendría a sustituir al fracasado Gran Premio de España, que debería haberse disputado en el circuito urbano de Fuengirola.

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