Los acuerdos de la junta de Koipe, considerados nulos por los accionistas españoles
Los acuerdos adoptados por la representación de Leiseur en la junta general de Koipe, celebrada el pasado sábado, después de que el presidente de la sociedad hubiera levantado la sesión carecen de validez, según informa la agencia Efe. El presidente ejecutivo de Koipe, José Antonio de Urquizu, levantó la sesión, que se celebraba en un cine, en medio de un ambiente de tensión y ante la imposibilidad patente de que las partes en conflicto llegaran a un acuerdo.
Los representantes de Leiseur, que controlan el 49,9% de las acciones de Koipe y que protestaron la decisión del presidente, decidieron continuar la junta. A pesar de la dudosa legalidad del procedimiento, acordaron destituir como consejero y como presidente de la sociedad a Urquizu, nombrando en su lugar como consejero a Vicente Salgado, propietario de un paquete de acciones suficiente como para dar, sumándolo al de Leiseur, la mayoría en el consejo.En opinión de medios jurídicos de Koipe, la sesión concluyó cuando el presidente la levantó en uso de sus facultades y a la vista de que había posiciones muy encontradas entre los accionistas. Durante la celebración de la junta, el grupo francés pidió la destitución del presidente, mientras que una buena parte de los accionistas españoles, encabezados por Juan Alcorta -fundador de la sociedad y actual presidente de honor-, solicitaban la destitución de los siete consejeros franceses por incompatibilidad, ya que el grupo Leiseur ha llegado recientemente a un acuerdo con el Banco Hispano Americano para la adquisición del ciento por'ciento del capital de Carbonell, sociedad que compite directamente con Koipe en los mercados. El grupo de accionistas españoles señalaba que el acuerdo de Leiseur Con Carbonell se ha hecho de espaldas a la empresa Koipe. El presidente de Koipe accedió a levantar la sesión tras una intervención del jefe de la asesoría jurídica del Banco de Bilbao, que controla el 9% de las acciones de Koipe, en la que señaló la incongruencia de que Leiseur interviniera en la votación de su propia incompatibilidad.
Según fuentes del consejo de administración, la junta extraordinaria de accionistas celebrada el sábado a continuación de la junta general ordinaria no puede considerarse válida, ya que en el momento de su celebración el capital social de Koipe era mayoritariamente extranjero. Esta sociedad no tiene la autorización para tener mayoría de capital extranjero, por lo que al tenerlo de hecho anula e invalida todas las decisiones que sean tomadas en condiciones irregulares. La mayoría de capital extranjero se debe a que estaban presentes Merryl Linch -actuando por terceros- y la Banca Popular Suiza. La suma del capital detentado por Leiseur y el de estas dos sociedades supone el 50,3%, del capital social de la entidad.
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