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Una jornada que no pasará a la historia

La bolsa se mostró sostenida y con un aflujo menor de papel en la primera jornada de la semana y límitó la pérdida a 16 centésimas en el índice general, principalmente a consecuencia de los resultados negativos obtenidos en los sectores de banca, alimentación, inversión mobiliaria y varios. Por el contrario, electricidad, construcción, siderometalúrgicas, químicas-textiles y comunicaciones resistieron bien la inercia de la semana anterior.Los bancos perdieron 43 centésimas en conjunto, siendo los descensos más significativos seis enteros en Popular, cuatro en Andalucía y dos en Central e Hispano. En el lado opuesto, Fomento subió cuatro enteros y Bankinter uno. Bilbao, Central, Exterior, Santander y Vizcaya repitieron cambio y sentaron, de alguna forma, la tónica del corto.

Las operaciones por caja de estos títulos señalaron pequeños saldos vendedores en todas las entidades (excepto en Bilbao, que registró un saldo comprador de 6.061 títulos) siendo la más importante la de Banesto, con 28.808 títulos,: seguido de Central, con 22.808, y Popular, con 13.458 títulos.

Las eléctricas, que sufrieron una pérdida simbólica de cuatro centésimas en su índice general, resistieron bien y se lograron avances de tres enteros en Eléctricas Reunidas de Zaragoza -compensado por uña pérdida de igual cuantía en Viesgo- y de uno en Sevillana.

Cementos fue uno de los sectores que se comportó de manera más satisfactoria, al registrar una subida de cinco enteros en Valderrivas y de 2,5 en Asland. Telefónica, por su parte, que se elevó un cuarto, demostró que se había recuperado del descenso sufrido en las dos jornadas anteriores, gracias a la táctica empleada por sus cuidadores al comprar todo el papel a la venta el pasado viernes, incluso a costa de perder 2,5 enteros en la última sesión de la pasada semana. Ahora el dinero vuelve a este valor a un cambio más favorable.

Papelera protagonizó más de un comentario de los habituales al cerrar en posición de dinero a 49,50, dos enteros y medio por encima de su última cotización, lo que dejaba entrever que algún poderoso padrino se encarga de potenciar los títulos de esta empresa, que, después de sanear sus activos, se encuentra en mejores condiciones de cara al futuro.

El Águila, que continúa inmersa en una marejadilla de hipó tesis, cedió cinco enteros, mientras que Cros cerraba con dinero a 43 enteros (dos por encima de la última jornada). Este valor, claramente, atraviesa un momento de expectativa y nadie pensaba en desprenderse de papel. Bien al contrario, las ofertas de dinero fueron abundantes.

Dentro del mismo sector químico, Española de Oxígeno se encontró con dinero a 450, mientras que Explosivos ganaba tres cuartos y Energías cedía dos enteros.

La jornada vivió la contratación de una respetable cantidad de títulos, y aunque el dinero puesto sobre el tapete debió superar los 1.000 millones, aún no se puede hablar de consolidación del mercado, que parece continuar más preocupado por el mal tiempo sufrido durante las pasadas fiestas de San Isidro que por las ideas y venidas en el parqué.

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