Brigitte Bardot,
dedicada en los últimos años a la defensa de los animales, acaba de hacer un importante donativo a una sociedad protectora de aquéllos de cara a una subasta que se hará en Montreal (Canadá). Llevada de su amor, ha regalado un magnífico brazalete de marfil, sin darse cuenta de que el marfil proviene del elefante y de que éste es un animal protegido, por lo que la pulsera no ha podido pasar la aduana canadiense, a la espera de un permiso especial.
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