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El Real Madrid acusó la derrota ante el Barcelona

Luis Gómez

El Real Madrid zozobró con el Joventut. No hubo hundimiento porque los rivales también habían jugado mal y se pusieron nerviosos con la posibilidad de un triunfo en esas circunstancias. Ganarle al Real Madrid en su cancha, y encima jugando mal, era demasiado y los jóvenes del Joventut lo acusaron. A falta de 6 minutos, el Real Madrid había conseguido un tímido y dificulto so despegue de 9 puntos, pero Robinson, Romay, Fernando Martín, Iturriaga y Jackson tenían cuatro personales. La perspectiva era excitante. Por eso, el Joventut se alocó.El pabellón, casi lleno, estaba frío a las 19.00 horas. El público comtemplaba callado el encuentro, respetando reglas tenísticas. Lolo Sáinz estaba relajadísimo y Aíto más bien tranquilo, como si nadie se jugara nada, como si reinara sobre los intérpretes la sensación de que el triunfo local llegaría fácilmente. Nadie se inmutó cuando el Real Madrid se puso, con comodidad, con 16-8 en el marcador durante los cinco primeros minutos. Claro está que cinco minutos después resultaba que el Joventut estaba a dos puntos. Lolo Sáinz se levantó del banquillo para solicitar tiempo muerto cuando el marcador señalaba 27-29 y comenzaba un calvario. El técnico madridista se había puesto caliente; el público que estaba lento de reflejos, dio algunas palmas de ánimo cuando Jackson visitaba el banquillo tras haber realizado cuatro lanzamientos con resultado negativo Ayer, al menos, se contempló un espectáculo nuevo, el de Jackson en sus peores momentos.

En esos instantes, el conjunto local transplantó a sus aficiona dos el juego desarrollado en e Palau Blaugrana; los sistemas, los movimientos y los lanzamientos que propician el caos. Es decir hicieron lo que nunca deben de repetir, mientras un Joventut discretito pasaba a dominar en el marcador con comodidad. Al descanso, la sensación era la de una prolongada afección por la derrota ante el Barcelona. Era evidente que los jugadores madridistas aún no se habían curado. 41-47 era el resultado tras el descanso.

Todo lo demás apenas tuvo historia. Salvo, que en un determinado momento, Corbalán tuvo que pararse a botar la pelota y ordenar a sus compañeros que empezaran a jugar, vamos, que se movieran con cierto orden. Dado el desacierto general, se convirtió hasta en el máximo encestador de este segundo período. Jackson, que consiguió su primera canasta a falta de 30 segundos para el descanso, no volvió a intentar un tiro de media distancia durante mucho tiempo. Tras ocho minutos de la segunda parte, hizo su primer tiro y acertó, pero no lo intentó demasiadas veces más. El Joventut se había contagiado del desconcierto general y no acertaba a dominar con rotundidad; tuvieron oportunidad de apabullar en algunos momentos pero igualaron a sus rivales en pérdidas de balón.

Al final, y aunque el Real Madrid se había puesto por encima en el marcador, el Joventut tuvo una golosa oportunidad de alcanzar un triunfo a base sólo de estrategia.. Robinson, Fernando Martín, Romay, Iturriaga y Jackson se encontraban en la cancha con cuatro faltas personales.

Él Joventut dejó pasar su oportunidad y el Real Madrid se encontró con 14 arriba en el momento más crucial.

Otros resultados

En el mismo grupo, el Cacaolat de Granollers se impuso por 76-64 al OAR de El Ferrol. Los árbitros expulsaron por doble técnica al entrenador del equipo gallego, Pim Shea, y se quedaron con las fichas de los jugadores Washington y Aller, del mismo equipo. En la A-2, el Hospitalet perdió en su cancha ante el Cafisa Canarisa, por un 87-88. Cabrera, del equipo canario, hizo 32 puntos.

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