Barajas quedó ayer bajo mínimos en dos ocasiones, a causa de la niebla

El aeropuerto madrileño de Barajas permaneció ayer cerrado al tráfico aéreo en dos ocasiones, por la mañana y por la tarde. Entre las 11 horas y las 12.30 se produjo el primer cierre, como consecuencia de la niebla que cubrió las instalaciones y situó la visibilidad por debajo de los índices mínimos de seguridad para efectuar aterrizajes, según manifestaron fuentes de Iberia.La situación provocó notables retrasos en la llegada de gran número de vuelos.

El cierre de las pistas por la mañana obligó a desviar 16 aparatos de distintas compañías hacia otros aeropuertos españoles. La mayor parte de los aviones desviados aterrizaron en Barcelona, a la espera de poder continuar viaje. Los aparatos procedían, según fuentes de la compañía aérea española, de ciudades europeas. Una vez despejada la niebla, a partir de las 13 horas comenzaron a tomar tierra de nuevo en Barajas.

No sufrieron retrasos, sin embargo, los vuelos que tenían prevista su salida desde el aeropuerto de Madrid, puesto que, según la misma fuente, la falta de condiciones de visibilidad sólo afectaba a los aviones que se encontraban en el aire.

El aeropuerto quedó cerrado de nuevo a las 19 horas, por encontrase otra vez bajo mínimos. La de ayer por la tarde es la quinta vez en poco más de dos semanas que los técnicos de tráfico se ven obligados a suspender las operaciones en las pistas del aeropuerto de Madrid, en todos los casos a causa de la niebla.