La RFA goleó a Turquía

ENVIADO ESPECIALLa RFA goleó a Turquía por 5-1, en encuentro de la Eurocopa marcado por un fuerte despliegue policial. A pesar del resultado, Turquía hizo un buen partido y consiguió aguantar durante casi una hora. Sin embargo, en ocho minutos fatídicos la selección alemana consiguió tres tantos que desmoralizaron por completo a sus rivales. En el descanso, la policía había practicado 20 detenciones entre hinchas neonázis. Por su parte, en encuentro del grupo III, Hungría derrotó por 1-0 a Dinamarca.

Völler, Rummenigge (2) y Stielike fueron los goleadores germanos por Hassan el autor del tanto turco. Al minuto 44, el ariete Völler abrió el marcador, pero Turquía mantuvo su juego, con pases cortos y una buena defensa. Sin embargo, entre los minutos 60 y 68 la RF A marcó tres goles. Ahí acabó el encuentro. Porque la noticia estaba en las gradas.

Los espectadores tuvieron que atravesar tres barreras de controles y fueron cacheados uno por uno antes de acceder al estadio. 6.000 agentes se encargaron de ello. No se permitía la entrada de nada que pudiese ser utilizado como arma. Un cordón policial rodeaba completamente todo el recinto del estadio olímpico de Berlín. Grupos de neonazis, de trabajadores turcos residentes en Berlín Oeste y de manifestantes contra el racismo y la xenofobia entraban en bloques al estadio olímpico, bajo la mirada atenta de la policía, que filmaba todo con cámaras de vídeo.

Entre los neonazis llamaban la atención el grupo Skinhead, (cabezas rapadas), muchos llevaban textos cosidos a la chaqueta que decían: "Estoy orgulloso de ser alemán". En la explanada de acceso a las tribunas cantaron canciones de la época nazi.

Al ver aparecer a un grupo de turcos los neonazis empezaron a gritar "Alemania para los alemanes" y "fuera los extranjeros". 45 minutos antes del comienzo del partido llegaron en bloque unas 4.000 personas, que se manifestaban a favor de la igualdad de derechos para los extranjeros y contra la xenofobia. Los manifestantes llevaban pancartas que decían llaleman-es y extranjeros de esta ciudad por la paz y la amistad", "juntos en el trabajo, juntos en la vida". Otras pancartas pedían "prohibición de todas las organizaciones fascistas" y "unidos contra la caza de extranjeros".

El alcalde gobernador de Berlín Oeste dirigió un llamamiento a la población alemana a través de las pantallas de televisión, solicitando que el partido fuese una demostración de la comprensión entre los pueblos y advirtió contra la presencia de "radicales venidos de fuera, que quieren destruir el buen nombre de Berlín". Asistió al partido, desplazado desde Bonn, el canciller de la RFA, Helmut Kohl, que justificó su presencia debido alrcarácter "político" del encuentro. Se temía que a última hora de la noche, después de finalizado el partido, se produjesen incidentes en el metro o en los barrios turcos.