Rupérez: "Todavía vivo, pese a que muchos me habían enterrado deportivamente"
Faustino Rupérez sintió el domingo la rabia de quien realiza un esfuerzo tremendo sin premio. Le faltaron fuerzas, le sobraron diez kilómetros para haber alcanzado la gloria de una medalla de plata en el Mundial. También perdió el bronce por media rueda. Pero ganó algo tan importante como el reconocimiento de su trabajo. Es un hombre tranquilo, pero que no puede dejar de exclamar ahora que "todavía estoy aquí, vivo, pese a que muchos me habían enterrado deportivamente".
En el salón de un hotel de Saint-Gallen, cinco horas después del Mundial, dos hombres se comen con los ojos la televisión. Las imágenes repiten varias veces los últimos tramos de la prueba. Suena el himno de Estados Unidos, y se alzan las banderas norteamericana, de Holanda e Irlanda. Marino Lejarreta repite una y otra vez que "no pude hacer más. El circuito no me iba y al final no pude ni tratar de impedir que saltaran en busca de Faustino". Rupérez prefiere "no pensar en la plata o en el bronce que pudo ser. Lo di todo".Desde hace cuatro años Rupérez suele darlo todo en cada prueba. Su única frase que puede dar la impresión de alejarse de su tono comedido y prudente hace alusión a que "yo he sido el pionero de esta nueva generación del ciclismo español". Y es cierto. En el año 1979 se hizo profesional, tras iniciarse en el campo aficionado en el Club Ciclista Torrejón. "Sin ellos, sin Tito, la persona que más me ayudó, no hubiese salido adelante". Otro hombre con vista en esto del ciclismo, Javier Mínguez, le enroló ya como profesional en'el Moliner-Vereco, que luego pasó a Zor-Vereco, Zor-Helios Novostil hasta llegar al actual Zor-Gemeáz. Rupérez alcanzó su máximo grado de figura al ganar la Vuelta a España del 80.
Mantiene sus cualidades de regularidad, siempre está erí los primeros puestos, pero ya no es el primero. "No soy conformista, sólo que han aparecido unos compañeros con magníficas cualidades y la carretera está abierta para todos. Conmigo se volcaron, sé lo que es la responsabilidad de intentar ganar, de conservar un liderato, y por eso pongo todo lo que tengo, me sacrifico en favor de quien esta en mejor situación que yo. Sí, a veces es duro, sobre todo cuando alguna gente sólo te valora por las victorias. Y el ciclismo es algo más que un triunfo individual. Yo he ayudado a que otros consigan esas victorias, como antes apoyaron mi opción, y.como estoy seguro que se volcarían conmigo cuando se presente la oportunidad".
Nació el 29 de julio de 1956, en Piquera de San Esteban (Soria), pero a los 14 años se trasladó con su familia a Torrejón. Trabajó como aprendiz de soldador, y el dinero que gana con el ciclismo le servirá para intentar abrirse nuevos caminos. "El problema es que el ciclismo está muy mal pagado en nuestro país. Los hombres de elite ganan menos que cualquier jugador mediocre de fútbol". Este año renovó contrato ya para la próxima temporada y con suerte puede acercars e a los cinco millones de pesetas. "De momento no he pensado cual va a ser mi futuro cuando deje la bicicleta. Aún me quedan, al menos, tres años de plena actividad. Luego, veremos".
Faustino acarició el sueño. Media rueda le separó de ser el quinto español que logra una medalla en el Mundial. Pero tras la rabia contenida queda la íntima satisfacción de un deportista briHante al que directores deportivos, seleccionador y compañeros califican como "imprescindible". Y no sólo por su calidad sobre el sillín de una bicicleta. Mañana cerrará la temporada cón la Volta a Cataluña.
Tour del Porvenir
La 21ª edición del Tour del Porvenir comienza hoy en Lorient (Francia) con la novedad de contar en su segunda edición abierta a los aficionados con paticipaciones tan exóticas como Japón o Costa Rica. Con la ausencia del campeón mundíal, Lemond, y del medalla de bronce, Roche, favoritos entre: los profesionales, la RDA, con sus teóricos aficionados, debe dominar.
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