Hallado muerto un joven de 17 años, atado a la cama de sus padres

Jose María Herráiz, de 17 años de edad, fue hallado muerto a las 17.35 horas de ayer atado de pies y manos a la cabecera de la cama de sus padres y con heridas de arma blanca, según fuentes policiales. Al parecer, el móvil del homicidio fue el robo, ya que los padres del muchacho notaron la falta de un joyero que contenía alhajas de la familia.Jose María Herráiz había estado a primera hora de la tarde con sus padres, en la cafetería de la que son propietarios. Salió del establecimiento con dirección a su domicilio, sito en las proximidades, en la calle Arfe número 3, en el barrio de San Vicente, para recoger algunos objetos personales antes de asistir a clase de música en el Conservatorio. Un cliente habitual de la cafetería comentó horas después al matrimonio que estaba buscando determinado tipo de flor y que no había conseguido encontrarla. Los padres se acercaron con él a la casa, un chalé de dos pisos, para intentar coger en el jardín la planta que su amigo buscaba. Al llegar observaron que el tocadiscos estaba funcionando, y pensaron que su hijo se había quedado dormido. El padre, Pedro Antonio Herráiz, subió al piso de arriba, armado con un martillo y un cuchillo por si hubiese algún ladrón, según informaron ayer fuentes policiales. Al llegar al dormitorio del matrimonio se encontró el cadáver de su único hijo, atado a la cama. Jose María Herráiz había cumplido 17 años el pasado jueves. Su cuerpo presentaba dos heridas de arma blanca en el hemitórax izquierdo, a la altura del corazón, efectuadas con un cuchillo de cocina que fue confiscado.