Presunto atracador de 23 años, muerto por disparo de la policia barrio de La Elipa

Javier Escobar, de 23 años de edad, falleció poco después del mediodía de ayer en una calle del madrileño barrio de La Elipa, a consecuencia de los disparos efectuados por un policía nacional. Minutos antes, Javier Escobar y otros dos desconocidos habían asaltado un banco, donde se apoderaron de unos dos millones de pesetas. El suceso coincidió con las acciones desarrolladas por comerciantes de los barrios de La Elipa, Quintana y Bilbao en protesta por la reciente muerte de dos mujeres que quisieron impedir que atracaran su tienda de muebles.

Hacia las 12.30 horas, tres jóvenes armados penetraron en la sucursal del banco de Santander de María Teresa Saenz de Heredia, en el madrileño barrio de La Elipa. Los atracadores consiguieron sin dificultades su objetivo y se adueñaron de unos dos millones de pesetas. Sin embargo, cuando iban a emprender la huida se apercibieron de que, en el exterior, había un coche zeta de la Policía Nacional, que había sido alertado del robo. Se produjo en ese momento una tensa situación, resuelta por los atracadores con la ¡oma como rehenes de dos mujeres, que efectuaban, operaciones en el banco.Los tres atracadores salieron a la calle y fueron acosados por los agentes policiales, lo que permifló que las rehenes pudieran escapar. El trío asaltante, ante la gravedad de su situación, optó por dispersarse y continuar individualmente la fuga.

Javier Escobar, el único miembro de la banda que ha sido identificado por la policía, corrió unos cien metros hasta la cerca Villar, con la escopeta repetidora de cañones recortados que hahía de cañones recortados que había utilizado durante el atraco. Allí, frente al número 21 y al pie de un álamo negro, fue alcanzado en el rostro por el disparo de uno de sus perseguidores. Según la versión policial, el agente dio el alto al fugitivo y éste se volvió e hizo ademán de utilizar el arma.

Seis cartuchos en la escopeta

Hasta las 14.20 horas, momento en que fue recogido por una furgoneta del servicio judicial de Madrid, el cadáver de Javier Escobar permaneció en el suelo, acompañado por una escopeta marca Goucher Saint Etienne, con cinco cartuchos en el cargador y uno en la recámara. Escobar, un joven bajo y moreno, vestía pantalón vaquero, jersei a rayas azules y cazadora de tipo militar y color verde. En los bolsillos de esta ultima prenda, llevaba otros ocho cartuchos. La policía ha informado que el fallecido tenía antecedentes por tenencia ilícita de armas y que sobre él recaía una orden de búsqueda y captura. Sus dos compañeros pudieron huir con el botín del atraco y ayer a última hora de la tarde todavía no habían sido detenidos.

En torno a los lugares donde se desarrollaron estos hechos, se aglomeró una gran cantidad de personas, que comentaron con inquietud los violentos acontecimientos que está viviendo la zona.

Ayer mismo, varios centenares de comerciantes de los barrios de La Elipa, Quintana y Bilbao se manifestaron silenciosamente por la calle de Alcalá y alrededores, para exigir mayores condiciones de seguridad en el desempeño de sus actividades.

Un gran número de comercios de la zona cerraron también sus puertas por las mismas razones. Estas acciones han sido motivadas por la reciente muerte de Ángeles Heras y su hija María Jesús Goñzález. Las, dos mujeres fallecieron al intentar impedir que atracaran su tienda de muebles, situada en la calle de Emilio Ferrari, hecho ocurrido el pasado 28 de marzo.