Nuevo incumplimiento

Pablo Porta, que se considera inasequible al desaliento, acaba de cometer el peor de sus errores; no ha mantenido con los clubes mundialistas, cuyos estadios pertenecen al municipio, el acuerdo al que llegó con los alcaldes en presencia de Romà Cuyàs. Hasta la fecha había salvado bien el adquirir compromisos y no cumplirlos. Ahora tiene todas las de perder.Porta se libró bien de los acosos de la AFE por los incumplimientos de acuerdos que llevaron incluso a la huelga. Porta supo cómo obviar a Jesús Hermida a base de puentearle a través de los ministros de Cultura, pero con Cuyàs lo va a tener más difícil. Sobre todo, porque tras él está Javier Solana y no Íñigo Cavero. Porta, hasta la fecha, no se ha visto a solas con Cuyàs y él sabrá por qué. Seguramente, porque no puede presumir de vieja amistad.

En el que se suponía encuentro definitivo entre alcaldes y Federación, Porta se comprometió a que los clubes aportaran a los ayuntamientos un 25% de los beneficios mundialistas. Porta, de nuevo, usará el argumento de que no ha podido convencerles. Todos sabemos que la asamblea del fútbol y los clubes han dicho sí, siempre que Porta ha querido que lo dijeran. Tengo la impresión de que para la próxima entrevista con Cuyàs, aunque recurra a los buenos oficios de Josep Lluis Vilaseca, no se librará de que le pongan la cara colorada.