Aragón reivindica sus aspiraciones olímpicas

En un ambiente un tanto enrarecido se celebró en Jaca una reunión entre los máximos mandatarios de la Federación de Deportes de Invierno, FEDI, con su presidente, Alfonso de Borbón, al frente, por una parte, y los responsables de las estaciones de Candanchú, Formigal, Panticosa y Astún, el alcalde de Jaca, Armando Abadía, y el representante de la Diputación, Eduardo Aguilar, por otra. Los Juegos Olímpicos de 1992, que Jaca también ha solicitado, como Granada, ante el Comité Olímpico Español, COE, fue el principal tema de protesta y reivindicación, pues entre las candidaturas barajadas últimamente no aparece el nombre de la ciudad oscense, ni el de las cuatro estaciones de su periferia.

Cara los Juegos de Invierno de 1992 sólo se habla de Granada, por parte española. Los representantes aragoneses entienden que se hubiera podido evitar esta especie de contencioso con Andalucía si la FEDI hubiera emitido un informe técnico detallado de cada uno de los dos escenarios que aspiran a ser sede y lo hubiera remitido al COE. Sustentan esta argumentación apoyándose en que el área de la Jacetania cuenta con una mayor infraestructura que la de Sierra Nevada, aportando cuatro estaciones especializadas en distintas competiciones, como se puso de manifiesto en la Universiada de 1981. Asímismo -arguye la delegación aragonesa- se dispone de instalaciones y medios que no se encuentran en Granada, tales como un trampolín olímpico, una pista de hielo, un palacio de Congresos y regimientos especializados de alta montaña del ejército de tierra.Por su parte, la FEDI consideró que su papel debía ser la preparación de un informe económico sin entrar en derivaciones técnicas y presentó al COE los dos escenarios como igualmente capaces para una cita olímpica. La decisión definitiva sobre qué candidatura presentará España, la tomará el COE, siempre que el Consejo de Ministros apruebe los gastos, otro agravio comparativo para Aragón.