El arcángel San Gabriel,
o un bromista que pretende ser su doble y predica el fin del mundo para 1984, entre los automovilistas alemanes a los que se aparece haciendo auto-stop en las proximidades de la ciudad bávara de Munich. Una vez que los conductores muniqueses paran sus vehículos y recogen al autoestopista que pretende ser el arcángel San Gabriel reencarnado, éste les explica su divina procedencia y les comunica su pesimista profecía, "esfumándose" en el aire poco después, según han declarado a la policía germana varios conductores asustados. Por si las moscas, las autoridades bávaras han iniciado una investigación oficial sobre este caso.
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