Llamamiento de los obispos para que se acaten los resultados electorales

Un llamamiento explícito de los obispos en el que se resalta la obligación de "acatar el resultado de la voluntad popular, respetar las instituciones y el gobierno resultante de las urnas, y seguir colaborando, aunque sea desde una oposición constructiva", es el punto más novedoso, respecto de documentos similares, del texto elaborado por la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Española, bajo el título La conciencia cristiana ante las próximas elecciones" que fue dado a conocer ayer por la tarde. Antonio Montero, portavoz de la Conferencia, negó que esta advertencia viniese dada por la posibilidad de un triunfo del partido socialista en las próximas elecciones legislativas del 28 de octubre.

En el documento, según el mismo portavoz, "se vuela a una altura suficiente para ver la realidad sin interferirla" y "no se desciende a la casuística". Con este último argumento, el portavoz de la conferencia evitó responder a algunas preguntas sobre el voto por parte de los católicos a partidos marxistas, o que propugnan el divorcio y el aborto. También justificó la ausencia de una cita explícita al intento de golpe de estado del 23 de febrero del año pasado, si bien admitió que la referencia a la eficacia de las instituciones "mediante la superación de pruebas muy difíciles", que hace el texto episcopal, bien pudiera englobar estos hechos.El texto distribuido ayer califica a la Constitución como "deficiente y ambigua en algunas claúsulas importantes", para añadir sin embargo que "se ha demostrado válida como instrumento de convivencia entre los españoles". Tras afirmar que "se aprecia en el ambiente un cierto estado de cansancio y de desánimo", el documento señala una serie de factores que "propician la desconfianza hacia el mundo de la política", e incluye a continuación los que llama datos de esperanza, entre los que cita la Constitución, el vigor de las instituciones y, sin mencionarlo expresamente, el Acuerdo Nacional sobre Empleo (ANE).Los obispos califican la emisión del voto como "un acto moral que presupone la formación de la conciencia cristiana sobre los puntos fundamentales de la vida personal y colectiva" y enumeran nueve, entre los que se incluyen "los derechos humanos, comenzando por el de la vida incluso para los nacidos"; "la protección eficaz del matrimonio y de la familia"; "el derecho de los padres a elegir el tipo de educación que reciban sus hijos", y "la aproximación, en suma", afirma el documento, "a un tipo de sociedad lo más cercano posible al ideal del Evangelio"

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