Connors: "El 'open' de EE UU es mi torneo, lo amo"

Jimmy Connors y Chris Evert-Lloyd han tenido desde siempre una carrera paralela. Sin embargo, han llegado al cénit de su coincidencia en el open de los Estados Unidos de este año. Chris y Jimmy, que ya ganaron juntos en los open de Estados Unidos de 1976 y 1978, han vencido esta vez en sus finales a dos checos. Evert-Lloyd se impuso sin problemas a la irregular número uno del tenis europeo, Hanna Mandlikova, de sólo veinte años (6-3, 6-1). Connors derrotó al sucesor momentáneo de Borg en Europa, Ivan Lendl, con veintidós años, por un resultado más ajustado (6-3, 6-2, 4-6, 6-4). Con sus victorias en la pista central Louis Amstrong han ganado cada uno casi diez millones de pesetas. En Flushing Meadow, los premios son iguales para los dos ganadores.

Si Chris Evert-Lloyd, con veintisiete años, conquistaba por sexta vez el título femenino, Jimmy Connors, con treinta años, lo hacía por cuarta vez en la categoría masculina. Para Chris, ésta era su séptima final, mientras que para Jimmy era la sexta. Perdió en 1975 ante Orantes y en 1977 frente a Vilas. Ambos han ganado el open de Estados Unidos en las tres superficies sobre las cuales se ha jugado en los últimos años. La hierba primero y luego tierra batida de Forest Hills, y el decoturf de Flushing Meadow.Los dos triunfadores forman parte de la raza de escogidos de este torneo. Entre los hombres, sólo McEnroe (1979, 1980 y 1981) y Jimmy (1978 y 1982) han sido capaces de ganar en la jungla de Flushing Meadow. Entre las mujeres, sólo lo han logrado Tracy Austin (1979 y 1981) y Chris (1978, 1980 y 1982). Los cuatro, estadounidenses.

Sus dos peores enemigos fueron derrotados antes de llegar a enfrentarse a ellos. Chris se salvó de jugar ante Martina Navratilova, que la derrotó en Wimbledon, porque fue eliminada por Pam Shriver en cuartos de final. Sin embargo, Evert-Lloyd ha reconocido que "pese a ganar en Flushing Meadow, creo que Navratilova sigue siendo la número uno este año. Ha hecho una mejor temporada". Chris ha anunciado que en diciembre tomará una decisión sobre su continuidad en el tenis competitivo. Hanna Mandlikova, su rival en la final, ha dicho sin rubor que "si se retira me sentiré muy contenta porque cada día que pasa juega mejor".

Connors ha sido precisamente el que siempre ha entendido mejor al público de Flushing Meadow: "Este torneo es el mío", dijo tras vencer en 1978, "lo amo, como amo también a este público. La violencia, la sangre le gustan. Yo me esfuerzo para dárselas". Connors, que fue mejor jugador del mundo de 1974 a 1978, tiene ya asegurado ese puesto para este año 1982, tras su triunfo en Wimbledon ante McEnroe y su victoria en Flushing Meadow ante Lendl. Y lo ha logrado gracias a su estilo agresivo y a la violencia de sus golpes. De él ha dicho Arthur Ashe: "De Connors se sabe donde van a ir sus bolas, pero se tiene un segundo menos que ante cualquier otro jugador para ir a buscarlas".

Connors, además, es ya el jugador predilecto del público neoyorquino. Hasta la aparición de McEnroe, sin embargo, Jimmy era odiado por su carácter altivo. Pero ha cambiado, y ahora el público prefiere verle ganar a él antes que al caprichoso McEnroe o al antipático Lendl. Quizá haya sido el alejamiento de su madre, Gloria, lo que haya influido más en el cambio de carácter de Jimmy. Gloria le seguía por todos los torneos del circuito. Era su manager, su confesora, su mano derecha. Ella fue la que obligó a su hijo a jugar al tenis desde que empezó a andar y siempre le repetía: "Nunca hagas las cosas a medias". Ahora, Gloria ha sido sustituida en los viajes por Patti McLguire, con la que Jimmy se casó tres veces (Japón, Los Angeles y Nueva York) y que fue la primera que felicitó a Connors tras ganar en Wimbledon este año.

Fácil victoria

Connors tan sólo tuvo problemas con Jimmy Arias, en dieciseisavos, y con Vilas en semifinal. Ante ambos cedió un set. Lendl, sin embargo, tuvo un camino mucho más dificil hasta llegar a la final. El checo derrotó a Solomon, Wilander, Warwick, Tim Mayotte y, en semifinales, John McEnroe. Este último veía así cortada su racha de triunfos en los tres últimos open de Estados Unidos. El ostracisino voluntario de Borg parece haber sido un maleficio para McEnroe. Desde que el sueco dejó las pistas tras perder el año pasado en Flushing Meadow ante McEnroe, éste no ha sido capaz de ganar ni uno sólo de los tomeos importantes. John ha perdido todos sus títulos: Wimbledon, simples y dobles, y Estados Unidos, también en simples y dobles. Tan sólo le resta la Copa Davis, que ganó el año pasado con Estados Unidos. Este año deberá enfrentarse en la final a Australia.

Lendl, como Poulidor

Lendl continúa mientras tanto su carrera de eterno segundón, al estilo del ciclista Poulidor. Iván el terrible, como le conocen sus detractores, no ha ganado nunca ninguno de los torneos del Grand Slam, que son los que otorgan categoría Lendl, que ha ganado este año a McEnroe en varias ocasiones a Connors hace menos de un rnes, por 6-1 y 6- 1, sigue fallando en los momentos decisivos.