El inmoral bloqueo de Beirut oeste

Desde hace varios días, las 300.000 personas no combatientes que se hallan atrapadas en el sector occidental de Beirut añaden el hambre, la sed y la falta de fluido eléctrico a la indecible angustia cotidiana que suponen los bombardeos de la aviación, la marina y la artillería israelíes, empeñadas en intensificar cada vez más su presión militar sobre los dirigentes palestinos, asediados en Beirut.Es curioso y aterrador constatar la ligereza con que la mayor parte de la opinión pública y los medios de información occidentales tratan el drama humano de los pobladores de Beirut. La problemática de Líbano parece reducirse a un acuerdo entre Estados, a una jugada de equilibrio entre bloques, a una solución políticamente abstracta, mediante la cual se pasará de la confrontación a la estabilidad. Hay que felicitarse de que haya sido la voz de la diplomacia española la que haya forzado una definición de las Naciones Unidas acerca del bloqueo de Beirut. Casi resulta superfluo decir que es improbable -que la resolución de la ONU alivie los sufrimientos individuales y colectivos de quienes! están condenados a ser espectadores y víctimas de un conflicto que no han provocado. ( ... )