Dos censores para el Mundial-82

El fracaso que, a ciertos niveles, significó el campeonato del mundo de fútbol celebrado en España, y la imagen generalizada de que algunas cosas habían rodado muy mal, hizo pensar a algunos miembros del Comité Organizador del Mundial-82 en la necesidad de que las cuentas del campeonato fueran auditadas por lo que, al parecer, se envió una petición oficial al Instituto de Censores Jurados de Cuentas, para que iniciara las gestiones oportunas y nombrara a dos censores.Saporta siempre quiso dejar muy claro que el dinero que ha manejado el Comité Organizador debe estar fuera de toda duda. Sin embargo, realizar una auditoría al Mundial-82 podría suponer la entrada de los censores en otros organismos que estuvieron vinculados a la organización, como lo fueron Mundiespaña o la Federación. Española de Fútbol. Los contratos en exclusiva serían también objeto de control y revisión y así la opinión pública podría despejar todo tipo de susceptibilidades.

La idea, hecha oficial, no parece haber gustado a todos los miembros del Comité, hasta el punto de que, ya con anterioridad a la fecha de comienzo del Mundial, el tesorero de la Federación Española de Fútbol, Benito Castañeda, mostró su oposición que el dinero de dicha entidad relacionado con el Mundial fuese controlado.

La tesis general de las distintas Federaciones Nacionales es que no se auditen los recursos propios, como sanciones disciplinarias, fichas, y competiciones. Es decir, dinero que no procede directamente del CSD.