Los partidos acogen con cautela los resultados del sondeo de EL PAIS

Los partidos políticos andaluces acogieron ayer con cautela los resultados del sondeo electoral ofrecido por EL PAIS sobre los comicios del próximo día 23. La actitud de máxima desconfianza hacia la encuesta se la repartieron los candidatos de UCD y PSA, los partidos que salieron peor librados en el balance de la consulta, mientras comunistas y aliancistas extremaban su discreción y los socialistas no ocultaban su satisfacción ante la ventaja reflejada por el sondeo.Durante el último fin de semana de la campaña, las fuerzas electorales intensificaron su actuación y trasladaron a Andalucía a sus principales líderes, para reforzar a los candidatos al Parlamento andaluz. En el caso del partido gubernamental, diez ministros participaron en los actos electorales. La tónica general de la campaña continúa centrada en las acusaciones que los socialistas reciben por su derecha sobre seguros pactos con los comunistas, reforzada por la posición de estos últimos sobre la necesidad de un pacto de la izquierda. El PSOE ha contestado a estos ataques con un análisis de los distintos partidos que concurren a los comicios, en el que incluyen observaciones descalificado ras especialmente dirigidas a UCD y PCE.

En todo caso, el ascenso que las encuestas más solventes vaticinan al PSOE, ocupa la atención de los partidos. En relación con el sondeo publicado ayer por EL PAIS el candidato centrista Luis Merino pretendió descalificar sus resulta dos. Igual actitud adoptó el número uno de los candidatos del PSA Luis Uruñuela. Mientras tanto, e¡ socialista Rafael Escuredo mostraba su alegría y valoraba como dato más relevante del sondeo, el elevado índice de participación previsto. El secretario general del PCE, Santiago Carrillo, se mostró reservado, y el líder de Alianza Popular, Manuel Fraga, no quiso pronunciarse.

Los últimos días de la campaña se presentan, según los observadores,, carentes de agresividad. En parte, a causa de la decisión de la Junta Electoral Central de no permitir el protagonismo político de los empresarios. Para tomar el relevo de este sector de la derecha, no se descartaba ayer en Sevilla que otras fuerzas conservadoras intensifiquen su actuación.

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