Probable ingreso en el PSOE asturiano de destacados ex militantes comunistas

El ingreso de José Ramón Herrero Merediz, ex miembro del Comité Central del PCE, en el PSOE podría ser seguido de la incorporación a este partido de otros destacados disidentes comunistas en su día expulsados o dados de baja a petición propia, como consecuencia de la grave crisis abierta en el PCE de Asturias en la tercera conferencia regional, celebrada en Perlora en marzo de 1978. El PSOE trata de afiliar a los cuadros que se fueron del PCE.En 1978, en una reunión del Comité Central del PCE, Herrero Merediz criticó severamente a Santiago Carrillo por haber decidido sin debate previo el abandono del leninismo. Esta decisión personal de Carrillo y el desacuerdo con la organización de la tercera conferencia regional asturiana provocaron el abandono de Perlora, localidad asturiana donde se celebraba la conferencia, de 110 delegados, encabezados por Vicente Alvarez Areces, ex secretario general del PCE de Asturias y miembro del Comité Central.

Los disidentes asturianos fueron considerados erróneamente leninistas por algunos observadores políticos. El paso del tiempo ha demostrado que el descontento surgido entre la militancia comunista asturiana, aparecido posteriorinente en otras partes del país, no estaba respaldado por un grupo homogéneo. Ideológicamente, los disidentes asturianos tenían en común poco más que su desacuer,do con la forma personalista de Carrillo de dirigir el partido y con la falta de democracia interna en el Partido Comunista de España.

Herrero Merediz ingresó en el PCE en noviembre de 1958. Dos años después fue detenido y condenado por el franquismo a catorce años de cárcel por motivos políticos. En 1978 abandonó el PCE y continuó trabajando durante algún tiempo como abogado laboralista de Comisiones Obreras, sindicato del que también se dio de baja por razones similares a las que se fue del partido.

La dirección socialista del PSOE ha recibido con indisimulada satisfacción la solicitud de ingreso en este partido formulada por Herrero Merediz, quien, lo mismo que otros disidentes del PCE, venía recibiendo insistentes invitaciones al respecto. Herrero Merediz manifestó que había decidido darse de alta en el PSOE porque es un partido en el que resulta posible el debate y la crítica, como lo demuestra la permanencia en el mismo de Luis Gómez Llorente y Pablo Castellanos.