Copa del Mundo de Atletismo una transmisión fallida

Los responsables de la programación deportiva de Televisión Española se apuntaron, en la noche del viernes, otro error que se suma a la tradicional desatención por este género de programas.Consiguieron los programadores que, a lo largo de una hora de transmisión de la Copa del Mundo de Atletismo, desde Roma -sesenta minutos y por la primera cadena-, los telespectadores no pudiesen presenciar ni una sola prueba atlética.

El anuncio de la transinisión en directo y hora preferente -inmedíatamente antes de la seounda edición del telediario- congregaba a muchos espectadores ante la pequeña pantalla. Se supone que a esa hora ven la televisión alrededor de diez millones de españoles. Esta Copa del Mundo pasa por ser además una olimpiada oficiosa, toda vez que Estados Unidos y la República Federal de Alemania. que no enviaron sus equipos a los Juegos Olímpicos de Moscú, acuden a Roma en esta ocasión con sus máximas figuras.

Era de esperar que, en la jornada inaugural, Televisión Española proaramase el duelo entre los norteamericanos Carl Lewis o Edwin Moses y los rivales de Europa; se hubiera podido presenciar el pulso entre Sebastián Coe y Steve Ovett. Pero los programadores no eligieron los mejores sesenta minutos, para ofrecer un espacio mínimamente atractivo.

Sólo las ceremonias inaugurales

La hora de Eurovisión se consumió en las ceremonias inaugurales de la Copa: la suelta de globos, los discursos en italiano, el destile protocolario de los participantes, la actuación de los abanderados florentinos y otras escenas sin relación alguna con el deporte.

El programa no dio más de sí. Los locutores anunciaron resúmenes filmados sobre los dos campeonatos mundiales anteriores, ofrecidos por la organización de la Copa, pero los telespectadores espanoles no llegaron siquiera a ver el segundo resumen.

Antes de alejarse definitivamente de las cámaras del Estadio Olímpico, los locutores insistieron en que las pruebas comenzarían a las 21.05 horas, tal como estaba previsto en los programas de mano, pero no en la mente del directivo responsable de los deportes en Televisión Española.