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Estreno en España de "Un americano tranquilo"

Veinticinco años después de su realización, Televisión Española estrena hoy una de las mejores películas de Joseph L. Mankiewicz. Prohibida por la censura del franquismo, nunca se importó debido a la falta de alicientes comerciales. Es una curiosa adaptación de El americano impasible, una de las mejores novelas de Graham Greene, traducida en Televisión Española por Un americano tranquilo (1957).

Tras casi diez años de trabajar para diversas productoras, Mankiewicz se ha convertido en uno de los realizadores más personales de su generación y crea la sociedad Figaro Productions. Sobre una idea suya escribe y dirige La condesa descalza (1954), que obtiene gran éxito de crítica y público. Después de Ellos y ellas (1955), un curioso musical íntegramente rodado en decorado para Samuel Goldwyn, vuelve a trabajar para su propia productora. Lo curioso es que esta vez no parte de una idea propia sino de una novela reciente de Graham Green que no le gusta nada. El resultado es un fracaso económico. No puede volver a trabajar para su compañía y se ve envuelto en el turbulento rodaje de Cleopatra (1963).«El americano impasible», dice Mankiewicz, «es una novela sin humor, amarga y de un antinorteamericano bastante absurdo. Da la impresión que un funcionano idiota del Departamento de Estado denegó un visado a Graham Greene y que éste, por rencor, decidió escribir un libro sobre un norteamericano imbécil, salido de Harvard a los veintisiete años, virgen, bebedor de coca-cola e importador de materias plásticas a Indochina para fabricar bombas. Al leer esta novela me interesó cómo las emociones de un hombre pueden afectar sus convicciones políticas. Fui a Saigón en 1954 y descubrí que Greene, que no habla muy buen francés, había traducido la palabra francesa plastique, explosivo, por la inglesa plastics, plástico. Y constantemente menciona esas materias plásticas que explotan. Green detesta la película, pero fue muy bien recibida en Francia. La película habla de una tercera fuerza en el problema del sureste asiático y es una reflexión sobre este problema. En la mayor parte de las películas que escribo tengo un portavoz, en este caso es el personaje del inspector Vigot, interpretado por Claude Douphin».

Graham Greene publica en 1955 El americano impasible. La novela narra las relaciones entre un inglés (Thomas Fowler), un norteamericano (Pyle) y una nativa (Phoung) sobre el fondo de las guerras del sureste asiático y desde el punto de vista del inglés que, como la mayoría de los personajes de Greene de esta época, está perdido en la soledad de un país que le resulta altamente exótico y preocupado por el problema de la existencia de Dios. Esta quizá sea la mejor de sus novelas sobre este tema porque parece ser la mejor escrita y la más sincera.

«No me gusta nada la versión de Mankiewicz», dice Green, «porque traiciona a Pyle y hace que Phoung se vaya a luchar con la CIA. Al contrario que en la novela, Pyle, el norteamericano, llega a convertirse en una especie de héroe. Mankiewicz le dio la vuelta a todo. Al inglés le convirtió en un estúpido comunista. Lo que más me disgusta es el cambio del sentido político de la historia. Creo que lo hizo para que pasara la censura impuesta por la guerra del Vietnam. Parece rodada en estudio y no en Indochina. Mankiewicz es un gran director, pero se perdió en la adaptación de mi novela».

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